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Maximiliano Vílchez / Delegado de Urbanismo y Medio Ambiente: «Sólo un poco más lejos del centro se podrían construir 50 torres Pelli»

«Icomos remitió el informe a la delegación internacional de la Unesco y ésta decide a final de mes»
«Icomos remitió el informe a la delegación internacional de la Unesco y ésta decide a final de mes»larazon

Sevilla- Su filosofía se resume en una frase: «Los técnicos son los que saben y el político sólo ha de poner la condiciones para que hagan su trabajo». Maximiliano Vílchez es el nuevo delegado de Urbanismo y Medio Ambiente. Su hablar pausado transmite confianza y seguridad, aunque admite tener que «estudiar mucho» a diario. En estos seis meses en el cargo ha confirmado que la atención al ciudadano no era como tenía que ser, «alejada de la eficacia y del servicio público». En cambiar esos hábitos trabaja.

–¿Para cuándo la ventanilla única?
–Nuestra idea es acercar la gestión al ciudadano y no marearlo. Para ello queremos aprovechar el desarrollo de las nuevas tecnologías, acercar la administración al domicilio del sevillano y que pueda hacer trámites reales y habituales desde casa o a través de un profesional habilitado para trabajar con la administración. Es la mejor ventanilla única que puede haber.

–Y su implantación...
–No será en un mes o dos, requiere inversión en tecnología y formación. La situación económica lo complica, pero se trata simplemente de copiar lo que ya hacen otros ayuntamientos, no tenemos que descubrir la luna.

–El Ayuntamiento quiere concentrar servicios municipales. El estado de las dependencias de la Gerencia obliga a buscar un realojo.
–Ahí tengo un cubo para las goteras del despacho –señala a la entrada–, la Gerencia está alejada del resto de centros y, además, sigue con carácter provisional en caracolas desde la Expo del 92, hace ya casi veinte años.

–¿Dónde encajaría mejor?
–Lógicamente, con Medio Ambiente, Parques y Jardines y todo lo que tenga que ver de manera directa o indirecta con Urbanismo. Con lo que ahora mismo forma parte de la delegación.

–¿Cuándo se trasladará?
–La anterior corporación había previsto que nos fuéramos a la Torre Pelli, pero ese convenio se ha roto. Por ahora, no hay opciones.

–¿Por qué esa dejadez de la Junta con el proyecto Cajasol?
–Por ley, la Junta tiene la defensa del patrimonio histórico andaluz. Y si la Torre Pelli lo altera, existe una responsabilidad también del Ministerio de Cultura. Luego, en el procedimiento de la concesión de la licencia hay informes que corresponden a la administración autonómica y a Fomento, y han aceptado la torre. Si la Unesco considera que tiene un impacto negativo, serían corresponsables de la paralización de las obras.

–¿Y este problema sólo lo tiene Sevilla en toda Europa?
–Si la torre estuviese cien metros más alejada del centro histórico o en la zona sur o norte, se podrían construir ésta y cincuenta más. Basta ver cómo emerge desde la Torre del Oro para comprobar el protagonismo que va teniendo en la ciudad. El impacto es por su proximidad.

–Ha pasado casi un mes de la visita de Icomos y no hay noticias...
–Nos dijeron que su criterio lo tendrían formado en corto plazo, pero debían pasar su informe a la delegación internacional y ésta era la que ya a nosotros nos decía cuál era el sentido del informe. Calcularon que a finales de diciembre.

–¿Llegaron a plantear que se incluyeran la Torre del Oro y San Telmo dentro de los bienes protegidos?
–Por la autenticidad, San Telmo no encaja tanto (ha sufrido remodelaciones), pero la Torre del Oro sí. No obstante, nos argumentaron que Sevilla en realidad tenía un conjunto histórico que en global podía considerarse patrimonio y no ya de manera puntual la Catedral, el Archivo de Indias y el Real Alcázar.

–Vamos con Fibes. ¿Si queda el 3% de la obras, por qué no estará operativo hasta junio?
–Eso no es verdad, se ha dicho que estaba en su fase final, superado el 90%. Lo que resta afecta al auditorio, al revestimiento de aluminio, y esa fase es más lenta. Pedimos seguridad a la UTE y nos han dicho que ésa es una fecha realista. Necesitamos que esté en funcionamiento para los congresos.

–¿La compra del edificio de la Gavidia en 2005 estaba justificada?
–Lo único cierto es que en el centro el Ayuntamiento no puede mantener un edificio de esa naturaleza en ese estado. Sólo sirve para acoger indigentes y dar una imagen que no corresponde a Sevilla. Por otro lado, es un bien patrimonial que puede servir para sanear las cuentas municipales. La herencia es bastante gravosa. No vendemos por gusto sino porque no tenemos liquidez para hacer frente a los pagos. Y cumplimos un doble objetivo, porque se puede revitalizar una zona que está bastante decadente o mortecina.

–Dar uso terciario al edificio resultará complejo...
-La Delegación de Hacienda nos ha pedido para poder venderlo que pierda la calificación de Servicio de Interés Sociocultural y tendremos que buscar otros locales a los que adjudicarles esa condición. En función de las ofertas que vengan se le dará un uso u otro.

–¿Está tasado?
–La tasación es de hace años. Habrá que actualizarla. Creemos que podemos recuperar la inversión (12 millones). Vamos a defender el valor de compra. Por ahora no hay un comprador, sólo rumores, y también lo esperamos para el edificio de la calle Pajaritos.

–¿Qué fue del proyecto Altadis?
–En nuestro programa siempre hemos defendido que Sevilla tiene que recuperar el río que tanto esplendor le dio. Primero nos tenemos que hacer con la propiedad de la fábrica. El barrio de Los Remedios es quizá el que menos equipamiento tiene de Sevilla y los ciudadanos nos los demandan. Queremos que sea algo emblemático.

–Si IKEA se adapta a la edificabilidad, ¿qué es lo que falta?
–Lo repito siempre, no es sólo una tienda. Es un proyecto más amplio, con más instalaciones y comercio en su entorno. El proyecto requiere estudios y un tratamiento técnico muy detallado y eso hace que se prolongue en el tiempo. Ese proyecto no fue capaz de sacarlo adelante el anterior gobierno, pese a que había sacado un convenio adelante. Nosotros creemos que sí.

–¿Se ejecutará la sentencia de la Biblioteca del Prado?
–El Ayuntamiento no tiene nada que decir. Nos gustaría que los demandantes y la Universidad llegasen a un acuerdo. Si no se produce, tendrá que demolerse.

–¿Quién no quiere sentarse con quien en el asunto de la Ciudad de la Justicia?
–La Junta con Zoido. El alcalde quiere que se construya. Es una necesidad y basta con ir por los juzgados para ver el espectáculo que es cualquier entrada o salida de un preso. La Junta pone trabas cuando es quien tiene la competencia y la obligación de construirla sin demorarse más. Inventa causas inexistentes que obstaculizan el proyecto. Hay una voluntad de no querer hacer.

–Después de la Copa Davis, Zoido quiere más deporte. Para ser sede del Mundial de Baloncesto de 2014 se necesita un nuevo pabellón. ¿Está ya decidido dónde se levantará?
–No, el Ayuntamiento ha transmitido a la Federación que tiene nuestra máxima colaboración para que Sevilla sea sede. El presidente José Luis Sáez conoce los planos y las zonas en las que tendría cabida su iniciativa. Están visitando las zonas para ver cuál sería el emplazamiento idóneo.

–¿Es viable en realidad?
–Sí, el proyecto que baraja la Federación es de un pabellón multisusos rentable. Lo vemos con los campos de fútbol, que han pasado se ser moles que se usan cada 15 días a albergar oficinas, hoteles, locales de negocio...

–Cospedal ha suspendido la construcción de VPO en Castilla-La Mancha, ¿tiene sentido aquí?
–No, cada territorio tiene su problemática. En Sevilla hay un enorme problema de vivienda. Hay mucha infravivienda y nosotros pretendemos redireccionar la contrucción pública hacia lo que es la reconstrucción. Hay muchos barrios en Sevilla con viviendas degradadas, con chabolismo vertical. No vamos a paralizar la construcción, lo que sí buscamos son alternativas a la financiación, que es el principal problema tanto del Ayuntamiento como del beneficiario de esas viviendas. Nos planteamos, por ejemplo, el arrendamiento con opción de compra. Y estamos abiertos a sugerencias. Queremos trabajar de la mano de todos.

–¿La oposición ha querido confundir?
-Clarísimamente, y como en tantos temas. Se dijo que eliminábamos la bicicleta, la viviendas sociales... Eso es falso y la prueba es que estamos realojando a familias en viviendas sociales, la bicicleta sigue funcionando... y con el plan de vivienda igual, ahí están las actas de Emvisesa. No hemos dicho que lo vayamos a eliminar nada, sólo que queremos estudiarlo. La realidad es que en 2010 y 2009 el anterior gobierno no construyó ninguna vivienda. Algo falla entonces. La situación que se avecina no es la de 2006 ó 2007 cuando se crea el plan.