Hoy España es favorita por LUIS ARAGONÉS

- Cuartos de final contra Paraguay, ¿es una eliminatoria favorable a España?
–España es favorita en este partido. Va a pasar.

- ¿No hay ninguna reserva? ¿Se pasará a semifinales?
–La selección ha ido de menos a más. Ha mejorado en cada partido que ha jugado y el segundo tiempo contra Portugal ya nos acercó a la España que todos conocemos. Como dicen en el instituto, progresa adecuadamente. Debemos seguir adelante. Confío, porque España es superior a Paraguay.

- Los paraguayos sólo han encajado un gol en cuatro partidos, ¿se cerrarán?
–Más que probable es lo seguro. Es una selección trabajadora, fuerte en defensa y con delanteros como Cardozo o Santa Cruz, muy poderosos arriba.

- ¿Qué tipo de partido hay que esperar?
–Los paraguayos jugarán al otro fútbol, no es una frase mía, es de Camacho. Harán faltas tácticas, provocarán interrupciones, per- derán tiempo si el marcador les es favorable, y eso es un empate; harán todo lo que sea para evitar la circulación del balón entre nuestros jugadores. Se cerrarán en defensa y utilizarán la contra. Pero, insisto, España es superior, lo que no significa que deba confiarse. Tenemos la experiencia de Suiza.

- ¿Brasil está bien eliminada?
–Este partido entre Holanda y Brasil no lo ha ganado el mejor. Con esta eliminación, el Mundial pierde atractivo.

- ¿Tan superior ha sido Brasil ante los holandeses?
–Holanda ha tenido dos ocasiones de gol y las ha aprovechado; pero no ha sido mejor. Brasil es una selección competitiva, fuer- te, que juega un fútbol práctico más que bello. Su cambio de ritmo ha sido lo mejor del Mundial.

- ¿Le ha perjudicado la expulsión de Felipe Melo, justa, por otra parte?
–Claro que lo ha acusado. Hasta que se quedó con diez fue mejor que Holanda, que ha sabido aprovecharse de su superioridad y de su acierto goleador. Ha sabido jugar al contragolpe y ha pasado a semifinales.

- ¿Deja un sabor agridulce la eliminación brasileña?
–Sí, porque son muchas las vir- tudes que se van del Mundial con este equipo. He aludido al cambio de ritmo, extraordinario, que se puede hacer con jugadores como Robinho, con laterales como Maicon y Bastos; con subidas como las que hace Lucio y un centro del campo que trabaja muy bien y se vacía en cada partido. No es el Brasil habitual, pero es el que hay con los jugadores que tiene.