Austria

Cuando la belleza es tóxica

Estar siempre radiante no es fácil: el veneno de serpiente, las inyecciones y los tratamientos con sanguijuelas son algunos secretos de las famosas

Gwyneth Paltrow, Charlize Theron, Melanie Griffith, Stacy Ann Ferguson y Demi Moore
Gwyneth Paltrow, Charlize Theron, Melanie Griffith, Stacy Ann Ferguson y Demi Moorelarazon

Nunca aquello de que para presumir hay que sufrir estuvo tan de moda. Al menos, así lo demuestran las diosas del Olimpo de las celebridades y sus «infalibles» secretos de belleza: unos trucos que rozan lo estrambótico y que, desde luego, no son aptos para cardíacos. El veneno de serpiente, la placenta de oveja y los chupitos de vinagre son sólo algunas de las claves que las famosas tienen en cuenta para estar siempre espectaculares. Como no podía ser de otro modo, el objetivo es cumplir años sin que el físico pague las consecuencias. Porque eso de que la arruga es bella está muy bien (siempre que sea en la cara del prójimo) y pocos son los atrevidos que posan ante las cámaras sin disimular los estragos que la edad va dejando en el rostro. Pero la pregunta es: ¿hasta dónde están dispuestas a llegar algunas famosas por mantenerse jóvenes?

Entre los casos más extremos se encuentra el de Demi Moore, de 48 años. En su afán de ganar el pulso al tiempo y acortar la edad que le separa de su marido, Asthon Kutcher (15 años más joven), la actriz siempre está dispuesta a sorprender al personal con sus milagrosos trucos de belleza. ¿Que cómo puede seguir teniendo casi la misma cara que cuando protagonizó «Ghost» en 1990 si Moore roza ya los cincuenta años? Por si fueran poco sus dietas, sus horas de entrenamiento extremo y sus polémicas operaciones (se habla hasta de un «lifting» de rodillas), confesaba hace unas semanas en el programa de David Letterman que se sometía a tratamientos con sanguijuelas. Una práctica que descubrió durante un viaje a Austria y que la intérprete utiliza como remedio purificante. «Te desintoxican por dentro, por una enzima que vuelcan en tu sangre. Pero no sirve cualquier sanguijuela. Tienen que estar médicamente entrenadas», explica. Eso sí, admitió que es bastante desagradable observar cómo estos minúsculos vampiros «absorben tu sangre y se van poniendo gordas y más gordas hasta que, emborrachadas, se caen rodando». Por supuesto, no tardaron en responder algunos expertos que cuestionaron los beneficios de esta práctica. Como la bióloga Daniella Muellan, que explicó que la cantidad de toxinas que las sanguijuelas pueden eliminar a través de la sangre que chupan de nuestro cuerpo es bastante ridícula. Y recomendó a Moore que «si lo que quieres es perder sangre, mejor hazte donante». Para César Casado, doctor de la Clínica Rubens Internacional, las sanguijuelas «lo único que hacen es favorecer el sangrado de los tejidos. No tiene un efecto rejuvenecedor ni revitalizante, sólo extraen sangre que tiene exceso de carbónico». Según los expertos, este tratamiento se usa con pacientes que padecen congestión venosa (la sangre que entra no puede salir bien) porque al ponerles las sanguijuelas mejora su circulación. «Tiene un efecto similar a la ‘‘heparina'', un anticoagulante» explica Casado.

Una vampiresa
¿Y cómo mantiene esa frescura en su rostro Angelina Jolie? El secreto puede parecer algo macabro, pero está avalado por muchos dermatólogos. Se trata del tratamiento con plasma rico en plaquetas, una técnica descubierta a finales de los años 80 que ya se ha aplicado en otros campos como la medicina deportiva. Consiste en extraer sangre del paciente, centrifugarla y aplicarla en el rostro mediante inyecciones. De este modo se consigue luchar contra el principal factor de envejecimiento, el adelgazamiento de la piel y, además, se potencia la fabricación de colágeno por su efecto estimulante. Sin embargo, los expertos advierten de que, para que la persona genere mucho colágeno, tendría que pincharse durante años. El efecto más visible de este tratamiento es que la piel luce un aspecto más hidratado y sano, pero el resultado depende mucho de las sesiones que se apliquen (y que deben hacerse con más frecuencia que otras técnicas a base de bótox o ácido hialurónico). A pesar de que es una técnica algo desgradable (se aplica con pinchazos), son muchas las famosas que se han rendido a sus beneficios: como Angelina Jolie, Nicole Kidman y Naomi Watts. Sin embargo, la gente de la calle suele utilizar este tratamiento de forma puntual, antes de que llegue el verano, o en citas especiales. Muy pocos hay que prolonguen su aplicación durante años.

Y mientras la dulce Gwyneth Paltrow amplía horizontes artísticos y se lanza al mundo de la música, la revista «People» saca a relucir sus trucos de belleza. Al parecer, la protagonista de «Shakespeare in Love» suele aplicarse cremas cuya base se extrae del veneno de serpiente. Es uno de los antiarrugas más celebrados de los últimos tiempos, aunque numerosos expertos cuestionan su poder de eficacia. Estos ungüentos utilizan un polipéptido que simula el efecto tensor de una picadura de estos reptiles. Sin embargo, su resultado se limita a un doble efecto: la sobrehidratación que produce en la piel en tan sólo unos segundos y la rigidez que generan los polímeros cuando se secan. Es, por tanto, un efecto tensor pasajero que desaparece con el primer lavado. Otras famosas como Denise Richard, la ex mujer de Charlie Sheen, buscan dicho efecto a través de cremas elaboradas con placenta de oveja. A pesar de los efímeros efectos de estos tratamientos, los fóbicos a los pinchazos todavía tienen una esperanza: ya existen ensayos clínicos que están utilizando la toxina botulínica en crema y en un año llegarán al mercado. En vez de pinchar para que el músculo se relaje, la aplicación se haría en forma de crema. Eso sí, tendrán que aplicarlo los profesionales y sólo se podrá utilizar en la zona de las patas de gallo.

Cóctel de vitaminas
Existen otros tratamientos rejuvenecedores de dudosa eficacia que también se aplican a través de inyecciones y que ya cuentan con un séquito de adeptos entre las celebridades. Los dermatólogos usan de forma frecuente inyecciones de ácido hialurónico como relleno de las arrugas más profundas; sin embargo, otras aplicaciones a base de vitaminas actúan casi como efecto placebo. Como explica el doctor Casado, «pueden hidratar más la piel, pero no aumentar el volumen». A pesar de todo, la cantante Katy Perry, de 26 años, reconoció que sus exuberantes curvas no son naturales y aseguró que se inyectó en los glúteos un cóctel de vitaminas, esteroides y antibióticos para producir un efecto «inflamatorio». Pero ningún médico avala la eficacia de este tratamiento. Hasta en la belleza, lo estrambótico está de moda.


- Gwyneth Paltrow
Edad: 38 años.
Tratamiento: aplica en su rostro crema elaborada a partir del veneno de serpiente. Además, no ingiere azúcar ni cafeína y tampoco bebe alcohol
- Charlize Theron
Edad: 36 años.
Tratamiento: al igual que otras intérpretes, la protagonista de «Lejos de la tierra quemada» se aplica inyecciones de vitamina que hidratan la piel
- Melanie Griffith
Edad: 54 años.
Tratamiento: uso aceite de emú (la segunda ave más grande del planeta) que hidrata la piel y también el cabello
- Stacy Ann Ferguson
Edad: 36 años.
Tratamiento: la cantante de Black Eyed Peas toma dos cucharadas de vinagre de jugo de manzana para tener menos hambre
- Demi Moore
Edad: 48 años.
Tratamiento: confesó en un programa que se somete a sesiones con sanguijuelas para «purificar la sangre».



ELLOS TAMBIÉN TIENEN SUS SECRETOS

En el mundo de la cosmética y de la belleza no sólo las mujeres quieren estar perfectas: los hombres también sucumben al ideal de la eterna juventud. Por ejemplo, Justin Timberlake a pesar de que sólo tiene 30 años, intenta mantener su rostro super hidratado con inyecciones vitamínicas. Por su parte, Brad Pitt utiliza el mismo método de belleza que Jennifer Lopez: un gel con diminutas burbujas sintéticas que simula la producción de colágeno.