Castilla-La Mancha

El Gobierno recortará en infraestructuras si la reforma no calma la economía

El Gobierno no descarta nuevos ajustes después de comprobar esta semana el escaso impacto de su reforma constitucional para consagrar la estabilidad presupuestaria sobre los mercados, que volvieron a castigar a España. De hecho, nuestra prima de riesgo, el diferencial entre el bono español a diez años y el alemán, subió el viernes pasado hasta los 311 puntos básicos desde los 290 que marcó un día antes.

José Blanco arremetió ayer contra el Partido Popular acusándoles de sacar «la motosierra allí donde gobierna»
José Blanco arremetió ayer contra el Partido Popular acusándoles de sacar «la motosierra allí donde gobierna»larazon

En este escenario, miembros del Ejecutivo no ocultan su decepción por la «ineficacia» de la reforma constitucional para frenar a los especuladores. Incluso expresan su malestar por el impacto que tendrá en las urnas para los socialistas la instantánea de unión con el PP. «Es una foto para nada, que da un balón de oxígeno innecesario a Rajoy», asegura un alto cargo del Ejecutivo a este diario.

Mientras, el Gabinete de Zapatero, alarmado por la situación en los mercados, esperará a cotejar si esta tendencia se asienta en los mercados antes de decidir la adopción de nuevas medidas. No obstante, fuentes gubernamentales consultadas por este diario no descartan la aprobación de un nuevo paquete de recortes, si los ataques persisten contra España. Este nuevo ajuste afectaría fundamentalmente a las inversiones en infraestructuras, según estas mismas fuentes.

Con este recorte, el Gobierno intentaría conseguir de los especuladores una tregua en un momento «delicado políticamente», con unas elecciones generales en puertas. De paso, se garantizaría el cumplimiento del objetivo de déficit público este año, que deberá concluir en el 6% del PIB. De momento, las finanzas autonómicas y de los ayuntamientos ponen en riesgo la consecución del mismo.

Después de que Cataluña y Castilla-La Mancha confirmaran la imposibilidad de cumplir con el objetivo de déficit, los ayuntamientos se levantaron este agosto en pie de guerra contra el Ejecutivo. En este contexto, Hacienda ha abierto la mano ante 2.574 ayuntamientos españoles, en su mayoría pequeños, algunos de los cuales no iba a tener ni para abrir las puertas, tras la intención del Gobierno de reternerles las entregas del Estado por no haber liquidado a tiempo el presupuesto municipal de 2010.

Para paliar el déficit de ingresos del Estado, Elena Salgado no descarta antes de que concluya la presente Legislatura resucitar el Impuesto de Patrimonio, cuatro años después de su suspensión. Los ingresos de Hacienda por este tributo se acercaban a los 2.121 millones de euros en 2007. La mitad de esta cifra era abonada por 47.000 contribuyentes.

El propio ministro de Fomento y portavoz del Gobierno, José Blanco, dejó este viernes la puerta abierta a esta posibilidad. Según Blanco, en las semanas que restan de Legislatura daría tiempo para recuperar este tributo, ya que su percha legal no fue derogada en 2008, fecha en la que dejó de aplicarse. Eso sí, el Gobierno se resiste, de momento, a subir el IVA dos puntos, como le recomienda la Unión Europea, para aumentar sus ingresos y, así, enjugar parte de su déficit.

Duran carga contra el PSC
El portavoz de CiU en el Congreso, Josep Antoni Duran Lleida acusó a los diputados del PSC de no tener coraje «de hacer lo que dicen con la boca pequeña en Cataluña». Estas declaraciones de Duran Lleida llegan tras la posición tomada por el PSC de votar a favor de la reforma constitucional aprobada el pasado día 2 en el Congreso. Con este motivo el portavoz de CiU pidió a los diputados del PSC «que no renuncien, por el bien de Cataluña, a tener una voz y voto diferente del PSOE» y matizó que cree que la reforma es «un error político grave».


Y el PP saca la «motosierra»
Mientras que su partido no descarta recurrir de nuevo a los recortes, José Blanco, ministro y portavoz del Gobierno arremetió ayer contra el Partido Popular acusándoles de sacar «la motosierra allí donde gobierna» y que «la estabilidad presupuestaria no puede ser excusa para que un gobierno recorte el Estado de Bienestar». Estas declaraciones llegan tras los «ajustes» que realizó el gobierno en su día, como la subida del IVA o la supresión del cheque-bebe.