Se acaba con 141 leyes aprobadas

Casi cuatro años de la novena legislatura dan para mucho en el Congreso de los Diputados, en lo que aprobación de leyes se refiere. Dan para dividir al mundo de la cultura con la polémica Ley de la Propiedad Intelectual –más conocida como Ley Sinde– o para enfurecer a todo el colectivo de fumadores de nuestro país con la Ley Antitabaco. Y qué decir de las normas en materia económica, algunas tan impopulares como la bajada de sueldos a los funcionarios, la congelación de las pensiones en 2011, la desaparación del cheque-bebé de 2.500 euros aprobada en 2007 o la elevación de forma gradual de la edad de jubilación a los 67 años.

En total han sido 141 las leyes y decretos que las Cortes han aprobado en estos casi cuatro años de legislatura que ayer daba a su fin. La mayoría de ellas, adoptadas para tratar de salir de la crisis o, al menos, tratar de paliar sus efectos devastadores. Ello incluye, por ejemplo, eliminar y recuperar en una misma legislatura el Impuesto sobre el Patrimonio, en un guiño al candidato Rubalcaba. En total, el paquete de medidas económicas del Gobierno ha copado 29 leyes. Y a las ya mencionadas, algunas saludables como las ayudas a las hipotecas para familias en dificultades, el subsidio de 420 euros para parados de larga duración o el bono social para facilitar el pago a la tarifa eléctrica de los más desfavorecidos. Pero otras, de dudoso beneficio, como el nuevo contrato de formación para jóvenes hasta los 30 años y la suspensión de la obligación de hacer fijo a los trabajadores que encadenen contratos.

El clásico discurso socialista desde que Zapatero llegara a La Moncloa aludía a que sería el presidente que más se preocuparía por los derechos de los ciudadanos. A la hora de hacer balance, no toda la población estará de acuerdo con esa afirmación. Por el camino, la más que polémica Ley del aborto que permite a las mujeres de 16 y 17 años interrumpir el embarazo sin comunicárselo a los padres, o la norma para agilizar las multas de tráfico, que en la práctica ha supuesto un drástico aumento de los radares en nuestras vías públicas. Ni siquiera el ente público de RTVE se ha librado, y eliminó la publicidad de sus parrillas por la ley de financiación.