Cinco «finales» consecutivas

Después, la segunda fase, en la que los españoles se van a encontrar con la Francia de Tony Parker, Serbia y, seguramente, Alemania, que ya ha demostrado que más allá de Nowitzki, tiene un bloque con pocos nombres, pero muy buena dinámica.

Todos estos «puertos» de alta montaña esperan a España antes de llegar a lo verdaderamente importante: el temido y definitivo cruce de cuartos de final. Este primer Eurobasket de la historia con 24 equipos convierte el torneo en una carrera de fondo, que requiere dosificar fuerzas. Empezar muy fuerte puede significar llegar fundido a lo importante y no tener las piernas frescas para decidir en los momentos clave. El físico va a ser decisivo y en este apartado, España está más tranquila que en otras citas, empezando por la gran estrella, Pau Gasol, que ha descansado más que nunca antes de unirse a «La Roja». La temporada se acabó de forma prematura para los Lakers y el «16» llega con ganas. Además, no ha tenido que esforzarse demasiado hasta ahora para estar en el segundo lugar de la tabla de anotadores justo por delante de Nowitzki y sólo superado por Tony Parker.

«Estoy en un buen momento y muy centrado. Soy consciente de que van pasando los años y cada vez me quedan menos campeonatos por jugar», explicaba Pau sobre su momento personal. Respecto a lo que viene, avisa de que todo será distinto: «Hasta ahora no hemos tenido un test tan duro como el de Lituania. Juegan sin un referente claro y su talento está muy repartido. Tendremos que elevar nuestro nivel de intensidad si queremos seguir invictos».