Actualidad
Cayetana y Alfonso de fiesta en fiesta por Jesús Mariñas
El aniversario champanero de Möet & Chandon fue un buen cerrojazo a una temporada en la que los saraos no han reflejado la crisis. Ha habido grandes fiestones, como las noches «Telva» o «Marie Claire», el alarde de Dior renovando el nuevo Ayuntamiento (gran acierto decorador de Gael Collet, que da en la diana reuniendo churras con merinas) y que se contraponen a los intrascendentes «photocall» realizadores de estrenos sin el menor ringorrango. Cruise con Cayetana fue guinda y prólogo del descanso pascual más que merecido en un tráfago de acontecimientos de todo fuste.
Sobresalen los dos últimos centrados en los Premios Alfonso Ussía de LA RAZÓN en los que la Infanta Elena remarcó tipazo con terciopelo marrón carmelita que remataba con una cola de caballo en tirabuzón tan juvenil como favorecedora. Elvira Rodríguez alardéo de 13 kilos perdidos con la dieta Dukan de la que cobra Caritina Goyanes –las rodillas maternas están en boca de todos: no son para lucir «mini»– y Ana Botella anunció como inexpugnable el lugar casamentero de su mayor, que se celebró ayer.
Duque estrenado
La marquesa de Benamejí se esponjaba en terciopelo azul pureza ante Enrique Cerezo y un Arturo Fernández que le preguntaba a éste sobre su programación teatral, mientras Mamen Sáinz crecía en tonos camel y Carmen Tello, ese «refugio pecatorum» de Alfonso Díez, el Duque recién estrenado.
Cayetana me mostró ufana el relojito de pulsera casi isabelino con cinco brillantes enmarcando la esfera, el primer regalo de su marido. Desgranan imágenes fugaces, como la mini cuadriculada de una Esperanza Aguirre que puede presumir de lucir piernas.
Yensañarlas –«no es lo de Cary»–, opinaban asombradas ante los recamados «morettos» que la Marquesa de San Eduardo lanza superando al veneciano Nardi, su casi progenitor.
Batirán récords estas fiestas y le quitarán ventas a Miriam Ungría, vaticinaban ante un Duque de Alba que llegaba de encargarse tarjetas de visita sólo como Alfonso Díez. La nobleza no se le supone, mientras Cayetano Martínez crea crisis familiar. Aireó su lado malo y prepotente. Le han dicho de todo, como en la fiesta del burbujeante francés impactó el pañolón repollo de Marichalar, la mirada captadora de Olivia Herbosch, el gancho de Vanessa Romero, que hablaba de la nueva tanda de «La que se avecina», o un barbudo Luis Valls Taberner que está preparando nuevo libro: «Mis conversaciones con Mario Conde son un éxito en la República Dominicana, donde viven algo parecido a lo que él padeció. La próxima casi será una autobiografía», comentaba al tiempo que arrancaba suspiros.Fernando Martínez de Irujo le pide al año nuevo «consolidar algún amor». Pilar Medina Sidonia lució gestó avinagrado con el sorprendente apoyo de un Tomás Terry con bastón de caña plateado. Él se las tuvo con un airado Julián Ayesa que le dijo de todo menos bonito, de traidor para arriba, lo que ustedes quieran.
✕
Accede a tu cuenta para comentar