Londres

El alcalde busca el «toque parisino» para el Metropol

Monteseirín niega que la ansiada doble boca del subterráneo bajo las «setas» cueste más que las terminales estándar.

El alcalde busca el «toque parisino» para el Metropol
El alcalde busca el «toque parisino» para el Metropollarazon

Alfredo Sánchez Monteseirín continuó ayer su diatriba dialéctica con la consejera de Obras Públicas, Rosa Aguilar, a cuenta de la parada del metro en la plaza de la Encarnación que desea el Ayuntamiento pero que rechaza la Junta de Andalucía. El alcalde redujo esta confrontación a las «diferentes perspectivas técnicas» sobre las dificultades constructivas bajo el Metropol Parasol y ofreció un nuevo argumento: su «ilusión» por una estación que tenga «comunicación directa con el Antiquarium», como ocurre en el Museo del Louvre de París. En esta búsqueda del «toque parisino» para las «setas» alemanas de Jürgen Mayer en el corazón de Sevilla, Monteseirín contó con el apoyo del consejero de Cultura, Paulino Plata, quien recordó que «en Londres o París no hay estaciones de metro iguales, cada una se adecua al espacio disponible», según informó Europa Press.La apuesta de Monteseirín pasa, precisamente, por encajar la parada de la Línea 2 en la Encarnación alterando el diseño estándar de los anteproyectos de la red completa del suburbano. Según los estudios de los expertos municipales que ya tienen «por escrito» los técnicos de Obras Públicas, esta excepción constructiva «no tiene por qué implicar sobrecostes» pese a contemplar dos bocas de metro, una hacia la «Encarnita» y otra «que salga dentro del propio edificio Metropol Parasol».El regidor socialista reiteró que sería una terminal «peculiar», reivindicando de nuevo que las estaciones se deben construir «a la medida del lugar donde se encuentren. Y el centro histórico, sin duda, tiene unas características y medidas muy especiales».Monteseirín volvió al redil socialista para aclarar que sus diferencias con la consejera «no son políticas, institucionales ni económicas», y descartar la presentación de alegaciones porque «hay un acuerdo político que no voy a romper en ningún caso».Más beligerantes se muestran los comerciantes de Alcentro, que exigen a la consejera «respeto» a sus alegaciones, que consideran «perfectamente factible» la parada en la Encarnación.