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Ilusión nervios y mucha emoción en la Cabalgata de Reyes

La Cabalgata de los Reyes Magos de Madrid ha congregado esta tarde la ilusión, nervios y emoción de miles de los más pequeños, que han asistido una vez más al espectáculo que abre la puerta a la noche más mágica del año.

Pasadas las 18.30 horas, sus Majestades ha partido de Nuevos Ministerios en una comitiva formada por una treintena de elementos móviles acompañados por música, danza y una gran lluvia de caramelos sin gluten que ha hecho las delicias de los más pequeños.

Abría paso un recreación del mundo infantil en África con juguetes de este continente, una banda de gaitas y el escuadrón ecuestre de la Policía Municipal, elementos que han observado con ojos bien grandes muchos niños de todas las edades, abrigados y la mayoría subidos a escaleras para no perderse ningún detalle.

Dos pequeñas, Estefanía, de 4 años, y su amiga Daniela, de 5, han relatado a Efe mientras esperaban a los Reyes su petición para esta noche: una caja registradora y un perro de peluche. Confían en que mañana tendrán los juguetes en su mano, porque - dicen ambas asintiendo con la cabeza - se han portado muy bien este año.

Nadia, de 8 años, ha pedido un muñeca "Monster High", uno de los juguetes de la temporada, y aunque ya tiene preparada la comida para los camellos y el turrón para los pajes, está convencida de que los nervios de esta noche no la dejarán dormir, ha explicado a Efe mientras miraba de reojo la cabalgata.

Desde antes de las dos de la tarde, muchas familias con niños aguardaban ante las gradas dispuesta a lo largo del recorrido (el eje Castellana-Recoletos) para tener el mejor sitio ante la procesión que cada año organiza el consistorio de la capital y que este años ha sido concebida en torno al tema "el regalo de la inocencia".

Con este hilo conductor, los organizadores quieren que los más pequeños recuperen el simbolismo original de los regalos que llevaron los magos de Oriente a Jesús y transmitir los valores inmateriales del presente.

Las grandes estrellas de esta tarde han sido sin lugar a dudas las carrozas de Sus Majestades los Reyes de Oriente que, acompañadas por un centenar de pajes, han contado con la luz y el color de más de un millón de bombillas led.

Los vehículos de Melchor y Baltasar han estado aderezados por una montaña de enormes caramelos, bastones dulces y galletas de jengibre que han captado la atención de los pequeños, mientras que la de Gaspar estaba engalanada con una gran estrella que guiará esta noche a sus compañeros hasta las casas de todos los niños.

Curiosamente, el Rey Melchor se parecían mucho al concejal del PP Joaquín Martínez; mientras que Baltasar y Gaspar, tenían cierto parecido a Gabriel Calles y Jaime Berenguer, ediles de PSOE y UPyD, respectivamente.