Romero-Haupold: «El año que viene será una hecatombe en el sector»

MADRID- El Gobierno ha decidido regular los posibles abusos por posición dominante en el comercio minorista. ¿Qué supondrá para los concesionarios de automóviles?
–La propuesta del Ejecutivo no es exactamente lo que nosotros necesitamos. Parece que se trata de una Ley de Distribución general, no específica para los concesionarios de automoción. En cualquier caso, tenemos que ser prudentes hasta que no veamos el texto. Está claro que éste es un tema muy importante. Pero también es urgente ver cómo remontamos las ventas, que caen con mucha fuerza de nuevo.

– ¿Qué plazos manejáis para que el mercado español vuelva a unos niveles «lógicos» o sea alrededor de 1,2 millones de unidades?
– Esa cantidad de la que habla sólo se alcanzará cuando el PIB crezca sostenidamente un 2,5% y el paro no supere el 15% de la población activa. De esta manera, se recuperará la confianza de los consumidores. La recuperación se puede iniciar lentamente en 2013, pero no será como muy pronto hasta 2016 cuando se consiga dicha cantidad.

–¿Qué circunstancias se tienen que dar para que esto ocurra?
–Insisto en que es muy importante que se recupere la confianza del consumidor. Estoy convencido de que esta crisis es una crisis, aparte de muchas cosas, de confianza. Esta confianza no se va a recuperar hasta que no desciendan las cifras del paro y hasta que el PIB crezca con alegría. Pero hay otra cuestión de fondo sobre la que nos debemos preguntar: ¿qué hemos hecho mal en nuestro sector para que estemos sufriendo tanto? Parece que el modelo de negocio de la automoción en nuestro país no ha funcionado, por lo que es urgente que nos sentemos todos los actores alrededor de una mesa para ver qué modelo es el bueno de cara al futuro.

–¿En qué punto se encuentra vuestra reclamación a las Administraciones públicas de las deudas pendientes del Plan 2000E?
–Ante la falta de respuesta por parte del Ministerio y de las autonomías, hemos presentado reclamaciones previas en vía administrativa para que se pronuncien respecto a las operaciones que no pudieron grabar por el cierre prematuro del sistema, al saltar el prorrateo. Se reclaman 1,5 millones a la Administración central y 6,5 millones a las autonómicas. Existen, además, operaciones grabadas y validadas que no va a pagarse porque las autonomías no han ingresado todo el dinero comprometido en sus presupuestos. Ésta es la situación que se da en Andalucía, Cataluña, Extremadura, País Vasco y Comunidad Valenciana.

– ¿Cómo ve el mercado de cara al año que viene?
–El año que viene no va a ser una catástrofe; va a ser una hecatombe. En 2011, según nuestros cálculos, el mercado se quedará en las 901.500 matriculaciones, aunque haya fuentes que hablan incluso de las 850.000 unidades, lo cual no es descartable. Muy malas cifras ambas, en cualquier caso. El año que viene esperamos un deterioro general de la situación. Un tercio de los puntos de nuestros puntos de venta están en peligro, lo que destruiría, de primeras, hasta 10.000 puestos de trabajo en los próximos seis meses.