Eurogrupo

Zapatero no descarta limitar por ley el déficit de autonomías y ayuntamientos

La canciller alemana, escoltada por seis ministros de su Gabinete, bendijo ayer las reformas acometidas hasta la fecha por el Gobierno español durante la XXIII cumbre hispano-alemana, que tuvo lugar en Madrid. «España ha hecho los deberes. Va por el buen camino», aseveró.

Su Majestad el Rey, en animada conversación con la canciller Angela Merkel y el presidente José Luis Rodríguez Zapatero
Su Majestad el Rey, en animada conversación con la canciller Angela Merkel y el presidente José Luis Rodríguez Zapaterolarazon

«En los últimos meses se han hecho grandes cosas, reformas importantes que han permitido cambiar el camino de España hacia un rumbo más positivo». Y, a su juicio, los mercados han tomado «buena nota» del golpe de timón dado por nuestro país. Por eso no caben especulaciones sobre un hipotético rescate financiero de España. Merkel, que tuvo que afrontar hace seis años la adopción de reformas sin consenso con los agentes sociales, alabó en el acuerdo alcanzado por Zapatero con sindicatos y empresarios.

Aunque la canciller se deshizo en elogios por el cambio de rumbo decidido por Zapatero, le requirió, al igual que al resto de los Estados de la UE, un nuevo esfuerzo para consolidar el euro a través del «Pacto para la Competitividad», que pretende apruebe el Consejo Europeo en marzo próximo. «El euro es una moneda única, pero también un proyecto político. Si fracasa, fracasa la UE», advirtió. Ante su demanda, José Luis Rodríguez Zapatero hizo propio el nuevo desafío de Merkel y mostró su disposición a respaldar este «Pacto por la Competitividad», cuyas líneas maestras pondrá hoy encima de la mesa la canciller en la reunión del Consejo Europeo.

Merkel, con el respaldo galo, propone que se limite por ley el nivel de déficit y de endeudamiento de los países del euro. De hecho, Alemania ha recogido estos techos en su Constitución. En el caso español, su inclusión en la Carta Magna supondría una reforma de la misma. Pese a ello, el Ejecutivo no descarta limitar por ley orgánica el déficit de todas las administraciones públicas, incluidas las corporaciones locales y las autonomías, según confirmaron a LA RAZÓN fuentes del Gobierno.

No obstante, en la rueda de prensa conjunta que ofrecieron ambos mandatarios tras la cumbre, Zapatero se limitió a explicar ayer que las autonomías gobernadas por el PSOE se han comprometido a establecer techos de gasto antes de elaborar sus respectivos presupuestos. «Ya tenemos una Ley de Estabilidad Presupuestaria a nivel nacional y es bueno que eso también se traslade a las comunidades», aseguró.

Mientras, fuentes de La Moncloa recordaron que España, al igual que el resto de países del euro, está obligada por el Tratado de Maastricht a que el conjunto de sus administraciones públicas no superen un déficit del 3% del PIB. Pese a esta obligación, el Gobierno de Aznar estableció por ley el techo de gasto, que derogó el PSOE cuando llegó a La Moncloa. Cinco años después, el Ejecutivo está dispuesto a reconsiderar su posición y a limitar por ley el nivel de déficit, si el Consejo Europeo de marzo aprueba el «Pacto para la Competitividad» de Merkel.

Este nuevo esfuerzo impuesto por la canciller también conlleva una revisión de los costes laborales unitarios. Alemania apuesta por suprimir las cláusulas de revisión salarial referenciadas a la inflación. El Gobierno de Berlín considera más adecuado para la economía vincular las subidas salariales a la productividad y a los beneficios de las empresas. En esta cuestión, España no seguirá la propuesta alemana.

Es más, Zapatero dejó en manos de los sindicatos y la patronal, que pactan ahora la reforma de la negociación colectiva, la decisión sobre la fórmula a utilizar para subir las retribuciones. Los secretarios generales de UGT y CC OO, presentes, por primera vez, en el almuerzo de clausura de la cumbre hispano-alemana, se opusieron ayer a la propuesta de Merkel. A este rechazo se sumó el propio ministro de Trabajo. Valeriano Gómez defendió el sistema de revisión salarial español, vinculado a la evolución de la inflación. Por tanto, esta cuestión no será una de las que el Gobierno modifique si, al final, se ve obligado a reformar la negociación colectiva ante la ausencia de un consenso de los agentes sociales, que tienen de plazo para cerrar un acuerdo hasta el próximo 19 de marzo.

El jefe del Ejecutivo se mostró más receptivo a la propuesta de la canciller de armonizar el Impuesto de Sociedades. Ambos mandatarios apostaron por realizarla a imagen y semejanza del IVA. Es decir, a establecer una banda de tipos del tributo. En el «Pacto para la Competitividad» de Merkel figura también el retraso de la edad de jubilación a los 67 años en la UE. España ya ha cumplido con este requisito con la reforma de las pensiones. Además, el presidente de la CECA, Isidro Fainé, tuvo oportunidad de intercambiar puntos de vista con su homólogo alemán durante el almuerzo que ofreció Zapatero a Merkel. Sin embargo, fuentes de La Moncloa negaron a este diario que durante la cumbre se tratara una eventual entrada de bancos germanos en el capital de las cajas españolas.


La puntualidad, disciplina y rigor alemán, en Madrid por un día
La canciller hizo ayer honor a la fama amasada durante generaciones por los alemanes de puntualidad, disciplina y rigor. La puntualidad la demostró en su audiencia con su Majestad el Rey. Angela Merkel sorprendió al Monarca al llegar unos minutos antes de su cita a La Zarzuela. Luego, cumplió con estricta puntualidad el resto del programa de la XXIII cumbre hispano-alemana. Sólo se permitió llegar tarde, con diez minutos de retraso, a la rueda conjunta que ofreció con el presidente español al término del almuerzo, al que asistieron los presidentes de Telefónica, Iberdrola, Acciona y de la CEOE, así como responsables de Deutsche Telekom, RWE y Siemens. El rigor y la disciplina germana se dejó sentir momentos antes de que Merkel y Zapatero hicieran su aparición ante la Prensa. El personal de protocolo de La Moncloa llamó la atención a los periodistas presentes para que guardaran el silencio debido.