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Ni juego ni intensidad (2-1)
El Atlético pierde ante el Mallorca, que jugó cuarenta minutos con diez. Aouate paró un penalti a Falcao
El efecto Simeone, más ruido que nueces, se evapora cuando se trata de partidos de Liga y el Atlético se va dejando por esos campos de Dios –como ocurrió en Santander y Gijón– todas sus opciones de meterse en la Liga de Campeones. Ayer fue en Mallorca, donde el equipo rojiblanco fue abofeteado por la tropa de Caparrós en un partido en el que la intensidad y el buen juego de los madrileños no existió.
No hay excusas para el Atlético. La del cansancio y el partido de Estambul no vale porque en la segunda parte, después de encajar dos goles y de fallar Falcao un penalti que pudo ser clave, demostraron que físicamente estaban bien. Al equipo de Simeone le faltó juego, capacidad para leer el partido y recursos para tumbar el entramado defensivo de Caparrós, que se refugió en su área cuando se quedó en inferioridad. Falcao (min 66) saltó el cerrojo del Mallorca con un golazo, minutos después de marrar la máxima pena, pero él y sus compañeros no encontraron soluciones para dar un disgusto a Aouate.
Dio igual que Simeone pusiera en el campo a Arda y a Fran Mérida. Con toda la artillería ofensiva, el Atlético se empeñó en abusar del balón aéreo, no hubo paredes claras, faltó el último pase y las entradas por banda de Salvio, torpe y sin tino, y Filipe Luis no propiciaron los espacios necesarios para obligar a los jugadores del Mallorca a perder la posición y trabajar más.
Que el Atlético acosó y agobió al rival en la media hora final nadie lo discute. Y que el dominio fue infructuso, tampoco. En el debe de los de Simeone está que en la primera parte jugaron a diez por hora, convencidos de que el ritmo era el adecuado y el partido fue un sopor. Solo se alteró en un disparo de «Chory» Castro que detuvo Courtois. Dos disparos de Falcao, flojos y sin colocar, fueron lo único de un Atlético en el que Adrián estaba espeso, lo mismo que Koke. Gabi y Mario cumplían y la defensa no sufría ningún sobresalto en un primer acto soporífero por parte de los dos equipos.
Lo malo para el Atlético es que prolongó su siesta en la reanudación y cuando se espabiló y se dio cuenta de que estaba en el campo ya había encajado dos goles. Uno en propia meta marcó Godín a disparo de «Chory» Castro, que pareció que se iba fuera; el otro lo hizo Pereira, tras una buena combinación de Hemed y Víctor que culminó el francés con un disparo cruzado. En cuatro minutos habían pasado más cosas que en los 45 anteriores.
Al Atlético le picó el orgullo, se revolucionó y buscó el gol. Llegó la jugada del penalti, la expulsión de Ramis y el error de Falcao en el lanzamiento. Tiró mal el colombiano y Aouate le adivinó la intención. El Mallorca respiró, Caparrós metió a Cendrós por Hemed, convencido el técnico andaluz de que había que manejar los tiempos del partido y de que Simeone haría algo por cambiar la situación. Entró Arda por Mario, llegó el golazo de Falcao y dio la impresión de que habría ocasiones para que el Atlético al menos lograse el empate.
Sin embargo, el dominio resultó infructuoso. El Mallorca se cerró muy bien, tapó huecos y trató con «Chory» Castro de pillar algún contragolpe. Y fue en ese tramo, especialmente en la media hora final, en que todas las carencias del Atlético afloraron en el Iberostar. Arda quiso poner pausa, Falcao el remate y Salvio unos centros que eran para la defensa o se iban a la grada. Sin precisión, con un fútbol atropellado, la ventaja fue para el mariscal Nunes, para el veterano Martí (36 años) y para el trabajo colectivo de los de Caparrós. Así abortó el Mallorca cualquier intento de un flojo Atlético, que perdió una buena oportunidad para escalar posiciones. Parece que al equipo de Simeone le sienta mejor Europa que la Liga. Y lo de ayer fue otro borrón.
Simeone y las aspiraciones
«Es un paso atrás, pero esto no termina aquí», afirmó el entrenador del Atlético, Simeone, que no renuncia a Europa. «Quedan once fechas y nuestras aspiraciones para la ‘‘Champions'' siguen intactas. Está claro que una derrota no es buena, pero dimos la cara, tuvimos ocasiones, el portero de ellos (Aouate) paró un penalti y peleamos hasta el final, no sólo por el empate, sino también por la victoria», explicó el argentino. A Simeone le gustó la reacción de su equipo tras el penalti fallado por Falcao. Y reconoce que no «estuvimos finos en los últimos metros».
FICHA TÉCNICA
RESULTADO: MALLORCA, 2 - ATLETICO DE MADRID 1, (0-0, al descanso).
ALINEACIONES.
MALLORCA: Aouate; Chico, Nunes, Ramis, Cáceres; Martí, Tejera (Tissone, min.42), Pereira, Castro (Pina, min.83); Víctor y Hemed (Cendrós, min.55).
ATLÉTICO DE MADRID: Courtois; Juanfran (Fran Mérida, min.67), Miranda, Godín, Filipe Luis; Mario Suárez (Arda Turan, min.60), Gabi, Koke, Salvio; Adrián y Falcao.
GOLES:
1-0, min.47, Godín, en propia puerta.
2-0, min.50, Pereira.
2-1, min.66, Falcao.
ÁRBITRO: Turienzo Alvarez (C. Castellano-Leonés). Amonestó a Castro (min.51), Pereira (min.54) y Aouate (min.69), por parte del Mallorca, y a Gabi (min.79), por parte del Atlético de Madrid. Expulsó con roja directa a Ramis (min.54), por parte del Mallorca.
ESTADIO: Iberostar Estadi.
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