Energía

FAES aboga por un retorno nuclear con centrales de 60 años

La Fundación para el Análisis y los Estudios Sociales (FAES) considera adecuado plantear una estrategia de "retorno nuclear"en la que se asegure el alargamiento de la vida de las centrales si cumplen las condiciones de seguridad y en la que se inicie un plan de selección de emplazamientos para nuevas plantas

En el libro de FAES 'Propuestas para una estrategia energética nacional', dirigido por Fernando Navarrete y coordinado por Pedro Mielgo, la fundación propone además la revocación del cierre de la central burgalesa de Santa María de Garoña, prevista para 2013.

El libro también propone realizar un análisis del impacto redistributivo del "bono social"y eliminar esta ayuda para sustituirla por un "tratamiento fiscal adecuado de los hogares con actual acceso al mismo".

Sobre el sector del carbón, se decanta por fijar "una fecha límite improrrogable a las ayudas"y por concentrar las actuaciones en los planes de reconversión profesional de los mineros y en el cierre de las explotaciones que requieran "ayudas económicas o subvenciones". El carbón nacional, señala, es "caro y de baja calidad".

En cuanto a las renovables, FAES aboga por establecer para las nuevas instalaciones calendarios de "desaparición paulatina de los apoyos fuera de mercado"y por fijar para las tecnologías más maduras la fecha en que dejarán de recibir primas.

Cuando las renovables provoquen un sobrecoste que supere los objetivos nacionales, el "exceso"de potencia instalada deberá ser asumido "directamente"por el presupuesto de las comunidades autónomas que hayan incurrido en esta instalación adicional de capacidad, afirma.

También defiende para el caso de las tecnologías menos maduras un cambio de modelo en el que se utilicen "procesos de subastas con apoyo en forma de estímulos fiscales"que sustituya a las primas o a los precios garantizados.

Junto a esto, FAES apoya la liberalización del mercado de los gases licuados del petróleo (GLP), en el que figura la bombona de butano, cuyo precio máximo fija trimestralmente en la actualidad el Ministerio de Industria.

 

DÉFICIT DE TARIFA
 "Mientras persista la acumulación de déficit de tarifa", indica el libro, es necesario "introducir una suspensión temporal en la instalación de nuevas plantas de producción eléctrica que requieran de apoyos fuera de mercado".

En suma, los autores se inclinan por eliminar de las tarifas y de los peajes del sector "todas las subvenciones a fin de que contengan únicamente costes regulados vinculados directamente a las actividades de generación, transporte y distribución de electricidad no liberalizadas".

Por otro lado, el libro considera que el Gobierno está aplicando en la actualidad una "política energética carente de visión global y nacional"en la que aplica una regulación "errática y cambiante".

El Ejecutivo, señala, no explota adecuadamente la posición estratégica del país, muestra "desorden"en el apoyo a las energías renovables y genera "mala calidad legislativa e inseguridad jurídica".