Daniel Zueras: «Me decían que habría sido un buen cura»

–«Wangolo». ¿Qué quiere decir?
–Es un nombre propio haitiano y el de una canción popular de allí.

–Servirá como leitmotiv en los actos del 30 aniversario de Ayuda en Acción. ¿Es de los que les cuesta ayudar o...?
–He colaborado con varias ONG y nunca me ha costado. Tengo el alma filantrópica. De joven me decían que habría sido un buen cura.

–¿Y cree que es verdad?
–No. No creo que hubiera podido con el celibato.

–Los beneficios de esa canción irán a Ayuda en Acción, a Haití. ¿Qué le gustaría que levantaran con su aportación?
–Un lugar para escuchar música. Las penas con música son menos.

–Me parece que usted quiere ir al cielo...
–Si existe, sí.

–En estos tiempos, la maldad goza de gran prestigio...
–Sí, y es algo que me cabrea mucho; eso y que al bueno le llamen tonto.

–Quedó segundo en «Operación Triunfo» en 2006. Me decía hace poco Virginia Laboite que nunca volvería a un concurso de la televisión...
–A mí me vino bastante bien, y creo que a ella también. Siempre he sido y seré muy agradecido con la gente que me ha dado una oportunidad.

–Canta «Amiga». ¿Prefiere las amigas a los amigos?
–Me entiendo mejor con las mujeres, me he criado entre ellas.

–«No me pidas amor». ¿Qué no le gusta que le pidan, alma filantrópica?
–Tiempo. Soy muy celoso de mi tiempo y a veces me gusta estar solo.

–«Luna sin miel». ¿Un viaje de bodas en tiempos de crisis?
–(Risas). Sí, podría ser. Son tiempos de ajustes, recortes y déficit.

–«Sueños». Ya puestos, cuénteme su sueño imposible...
–La libertad total, esa que no se alcanza nunca porque siempre somos esclavos de algo: del móvil, de internet, de la hipoteca...

–«Siempre». ¿En qué piedra tropieza casi siempre?
–En el desorden. Soy un desordenado pertinaz.

–«Somos». Homenaje a Labordeta. ¿Se anima a caminar el país con una mochila?
–Me encantaría. Un año de éstos haré el Camino de Santiago.

–Canta «Un mundo mejor». ¿Va a mejor o...?
–Depende de cómo te levantes por las mañanas. Me parece que en general va a mejor. Soy optimista, creo que hay que comerse el mundo.

–No me haga caso, pero creo que repite una barbaridad...