El paseo más feliz de Abidal

Una cara amiga apareció ayer por sorpresa en el césped de la ciudad deportiva «Joan Gamper». Entre los jugadores azulgrana que salieron a entrenar, sobresalía la espigada figura y la eterna sonrisa de Eric Abidal. Dieciocho días antes, le habían extirpado un tumor del hígado, pero ayer, vestido como cualquiera de sus compañeros, con el chándal de entrenamiento, el francés quiso estar junto al resto de la plantilla en la primera sesión destinada a preparar la visita del Shakhtar Donetsk mañana al Camp Nou.

El papel de Abidal fue meramente testimonial y se limitó a dar un paseo junto a un recuperador. Pero no hay duda de que esos pocos pasos supusieron la mayor alegría del día para todos. El galo no tardó en hacer sus primeras bromas, algo habitual. Piqué no se libró. «Él es el que nos da ánimos a nosotros, más que nosotros a él», confesaba luego David Villa. Abidal quiso participar en la charla táctica previa al entrenamiento que ofreció Guardiola, y se ganó una gran ovación de sus compañeros. Unos aplausos que se repitieron poco después con Andrés Iniesta, con motivo de su reciente paternidad.

Al que no se le vio fue a Leo Messi, que se quedó en el gimnasio haciendo ejercicios de recuperación. El argentino regresó de la concentración con la selección argentina con molestias musculares y ya fue reservado por Guardiola ante el Villarreal. De cara al duelo europeo ante el Shakhtar, su presencia está asegurada.

También marcha por buen camino la recuperación de Pedro. Ya ha superado sus problemas de pubis y ayer se ejercitó junto a sus compañeros por primera vez en muchos días. El canario es una pieza fundamental en el engranaje del juego azulgrana y Guardiola confía en que pueda coger el tono físico en estos dos días previos para que pueda jugar ante el equipo ucraniano. Lo mismo sucede con Maxwell, que también se reincorporó a la disciplina del grupo. Todo lo contrario que Puyol, que saltó al césped, pero sigue entrenándose al margen.