Andújar

El lince ibérico se recupera en Andalucía

El felino más característico de la Península está de enhorabuena. El último censo sobre el lince ibérico elaborado en diciembre del año pasado eleva a 279 el número de ejemplares silvestres que sobreviven en Andalucía.

El lince ibérico ha aumentado su población hasta los 279 ejemplares
El lince ibérico ha aumentado su población hasta los 279 ejemplareslarazon

Los cuatro núcleos de población donde habita en libertad este animal han experimentado un importante crecimiento en apenas dos meses, ya que el censo de octubre tenía constancia de un total de 253 linces.

Los 279 ejemplares censados a finales de 2010 suponen la cifra más elevada desde que hace una década se realizan estos estudios de forma sistemática, siguiendo la técnica del fototrampeo. Esta herramienta ha corroborado que el número de ejemplares se ha triplicado desde el año 2002, cuando se censaron 94 felinos.

Esta aplicación tecnológica consiste en la toma de imágenes a través de un dispositivo que alberga una cámara digital y un flash de infrarrojos que permite conocer no sólo la presencia de algunas especies, sino obtener estimaciones de su densidad, así como la identificación de individuos a través del diseño del pelaje o de las manchas propias de cada uno de ellos.

Este número de felinos se acerca a la cifra de 315 ejemplares fijada en el plan de recuperación de esta especie, aprobado la pasada semana por la Junta de Andalucía, como objetivo para el año 2016. Además, a estos ejemplares silvestres hay que sumar los 74 linces del programa de cría en cautividad, cuya población se ha reducido este mes tras la muerte de una pareja a causa de una enfermedad renal crónica.

La zona de Andújar y Cardeña, en la parte de Sierra Morena de Jaén y Córdoba, se ha consolidado en 2010 como núcleo principal de la población de lince ibérico. El carnívoro más amenazado de Europa y el felino más en peligro de extinción del mundo cuenta en ese territorio con 190 ejemplares, de los cuales 44 son hembras adultas que aún tienen capacidad reproductora.

El Parque Nacional de Doñana se ha erigido en el segundo hábitat más importante de concentración del lince. Este espacio protegido cuenta con 77 ejemplares, lo que significa que la población se ha duplicado desde el año 2002. Un dato clave es que el número de hembras fértiles ha ascendido hasta 17, hecho que garantiza el remplazamiento generacional de la especie en la zona.

Las otras dos zonas de Andalucía en las que el lince ha mostrado una mejoría, con la ayuda del hombre, han sido Guadalmellato (Córdoba) y Guarrizas (Jaén). En ambos municipios la Junta de Andalucía ha realizado una reintroducción experimental que ha cosechado un éxito notorio. Mientras que en Guadalmellato se han censado once linces, en Guarrizas hay cinco ejemplares, dos de los cuales son los primeros nacidos en cautividad que se liberan en el medio natural.


Las políticas de protección dan sus frutos
La Junta de Andalucía aprobó en 2002 el «Pacto Andaluz por el Lince», donde se sentaron las primeras bases acerca de la protección y recuperación de este felino amenazado. A esa iniciativa pionera se sumaron en 2007 dos proyectos que han permitido un verdadero repunte del número de ejemplares: el «Pacto Ibérico por el Lince», firmado por los ministerios de Medio Ambiente de España y Portugal, y el «Proyecto Life», basado en la reintroducción del lince en Andalucía. Entre las medidas tomadas destaca el reforzamiento genético y demográfico de la población de Doñana y la creación de nuevos núcleos de reintroducción.