Despidos

Cabreados por Ely del VALLE

La Razón
La RazónLa Razón

CC OO y UGT no han esperado veinticuatro horas para ponerse de uñas contra la Reforma Laboral, esa que ellos tuvieron la oportunidad de consensuar con la patronal y con la que han estado mareando la perdiz cuatro años. En algún momento se ha llegado a manejar el término «huelga general» como medida de protesta, pero así, de entrada, el amago se ha quedado en movilizaciones de fin de semana, conscientes de que el sindicalismo no pasa por su mejor momento y de que tampoco es cuestión de hacer un llamamiento a las masas para que las masas te respondan que tururú, que es lo previsible a tenor de las encuestas que siguen otorgando una confianza considerable al Ejecutivo de Rajoy. Ridículos, a poder ser, los menos.

Lo que no terminan de explicar con claridad los sindicatos es si lo que más les fastidia es el abaratamiento del despido en general o el hecho de que a partir de ahora se allane el camino de los ERE, esos que tan buenos réditos les han reportado en los últimos tiempos. No hay que olvidar que los sindicatos cobran a cada uno de los trabajadores afectados por un Expediente de Regulación de Empleo entre un 10% y un 15% de la cantidad que obtiene como indemnización por encima de los veinte días por año trabajado, y que ahora, al rebajar de treinta y tres a veinte días esa indemnización, el sobresueldo se les va a aligerar un tanto. Eso, sumado al recorte de una quinta parte de las subvenciones que reciben, y al detalle de que los cursos de formación dejan de ser de su exclusivo manejo, les coloca en una situación crítica; de ahí que explicar que su cabreo obedece más al interés común de los trabajadores que al suyo propio, sea tan complicado.