«Ganar siempre es maravilloso»

Bucarest- Las palabras de Simeone sonaban a despedida para el héroe de la final. «A Radamel lo conozco de hace mucho, desde que lo tuve en River. Le quiero mucho como persona y como jugador. No tiene techo. Espero que siga con nosotros y si no, lo que le haga feliz, porque le quiero mucho», decía sobre Falcao. El jugador no hablaba de su futuro. Se quedaba sólo con la felicidad por la victoria. «Lo que pueda decir no llega a demostrar la alegría después de todo lo que se habló cuando llegué. Decían que era un error, pero esperé a este momento para demostrar que el error lo tenían ellos», dijo. Y explicó que la jugada del primer gol tiene dueño. Se echó atrás para buscar espacio y la pegó al segundo palo. «Como me decía, siempre mi padre, aunque nunca le había hecho caso hasta hoy».

Simeone es consciente de que ese primer gol, el del padre de Falcao, resultó fundamental. «Ser concretos [tan pronto] nos acercó a sentirnos más cómodos en el campo. El equipo se sintió fuerte y el ser concretos nos dio tiempo para acomodarnos bien al partido e interpretar mejor las situaciones», afirmó. Y puso al colombiano como referencia de lo que deben hacer los futbolistas para enfrentarse a un partido así: "Entiendo que los chicos que tienen experiencia se jugaban un prestigio muy grande. Para los jóvenes es la primera final. Para los grandes el riesgo es doble, porque si no dejas de lado todo lo que ganaste no vuelves a ganar. Falcao se olvidó de lo que había hecho el año pasado y a partir de ahí, ganamos el partido».

El colombiano es el primer futbolista que gana la competición dos años seguidos con dos equipos diferentes. Simeone ya la ha ganado como futbolista y como técnico. «Siempre ganar es maravilloso, de jugador se disfruta más porque puedes gritar, correr, dar la vuelta olímpica. Como entrenador, tienes que mantener las formas porque el espacio es de los jugadores».