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El Bicing abrirá hasta las dos de la madrugada
El uso de la bicicleta ha aumentado un 30 por ciento en el último año
BARCELONA-Desde que el Bicing entró en funcionamiento, los usuarios las han visto de todos los colores. Con el paso de los años, el servicio ha ido mejorando paulatinamente. Dista mucha de la calidad de otras capitales europeas, pero es mucho más difícil encontrarse una bici sin frenos. En cualquier caso, una de los grandes paradojas va camino de resolverse. Y no es otra que los horarios. Hasta ahora, el Metro y el Bicing compartían las mismas franjas horarias. Pues bien, el Ayuntamiento ha tomado nota y una de las grandes novedades de cara a 2012 es que los usuarios podrán usar las bicicletas hasta las dos de la madrugada entre jueves y domingo. De este modo, el servicio se alarga dos horas cada día, puesto que hasta ahora finalizaba a la medianoche.
El objetivo de la medida, tal y como explicó ayer la teniente de alcalde Sònia Recasens, es «dar alternativas de transporte a los ciudadanos para la salida del cine, del teatro o de los restaurantes» y podría beneficiar a unos 1.500 usuarios que, entre semana, ya usan regularmente el Bicing en la última media hora de servicio. El coste de ganar estas dos horas diarias, un 10 por ciento más de servicio, lo asume la empresa concesionaria, Clear Channel.
Por otro lado, Recasens remarcó que el Bicing ya ha consolidado 120.000 usuarios, y que el número de usos ha crecido un 30 por ciento en relación al año anterior: se ha pasado de los 11 millones de usos a los 14,5 millones. Lo que se traduce en que cada bicicleta se utiliza, de media, 6,74 veces al día. El Bicing, además, será sustancialmente más caro que el año que viene, ya que, tal como anunció hace unos días el Ayuntamiento, los usuarios deberán pagar 40 euros, nueve euros más que hasta ahora, cinco por el abono anual y otros cuatro por un seguro.
En relación a la financiación del servicio, Recasens insistió en que el actual acuerdo con la concesionaria, firmado con el anterior gobierno es «inasumible» para las arcas públicas. «No nos conformamos con la factura actual del servicio de 13 millones de euros, así que continuamos estudiando fórmulas para rebajar mucho más el coste», subrayó. Y estas fórmulas pasarían por meter la publicidad en las bicicletas o implantar una tarificación por usos con diferentes modalidades de abono. Recasens avanzó que el Ayuntamiento ya está negociando con algunos anunciantes interesados, aunque no desveló cuáles.
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