Los comercios se rebelan contra la tolerancia de Saura con el «top manta»

BARCELONA- Los comerciantes catalanes están más que indignados con el conseller de Interior, Joan Saura, que consideró «razonable» la tolerancia del «top manta» en zonas alejadas del turismo. El secretario general de la Confederación de Comercio de Cataluña (CCC), Miquel Àngel Fraile calificó ayer de «disparate» esta tolerancia con los «manteros».
Todo comenzó cuando las turísticas localidades de El Vendrell y Calafell, ambas en Tarragona, aprobaron crear una especie de zonas para el «top manta». El único requisito es que tienen que estar lejos de las calles con más afluencia de turistas.

Alud de reacciones
Saura no atacó esta decisión y recordó que en este asunto la competencia es de los ayuntamientos. Estas declaraciones provocaron un alud de reacciones negativas, en el ámbito político, por parte del PP, y especialmente, de los comerciantes.
Fraile tildó la iniciativa de las zonas del «top manta» de disparate, irresponsabilidad y prevaricación». Añadió que los alcaldes saben el carácter «ilegal» de su actuación y dijo que «todo el mundo sabe que estas personas venden productos falsificados no están dados de alta en la Seguridad Social, de autónomos, ni de nada». Además, a su juicio, el «top manta» afecta a «la explotación de personas, ya que detrás de ellos hay mafias y delitos».
El responsable de CCC añadió, respecto a la postura de Saura, que «no lo entiendo, creo que el conseller ahora puede ir a comprobar realmente si lo que venden los ‘manteros' es correcto, y si estas personas reúnen las condiciones para esta actividad.
Con los comerciantes irritados con El Vendrell y Calafell y con Saura, la Cámara de Comercio de Barcelona emitió un comunicado en el que pide «tolerancia cero» a las autoridades ante la venta ilegal. Según la entidad, crear zonas de tolerancia supone «un precedente erróneo que obstaculiza el trabajo contra los ‘manteros'». Por si fuera poco, el presidente del Centro de Iniciativas y Turismo de El Vendrell, Juan Jesús Espina, calificó la medida de su municipio de «irresponsabilidad extrema» y anunció que presentará una queja a su ayuntamiento.
Con los comerciantes en pie de guerra, ayer nadie de la Generalitat dijo nada. Precisamente estos días el presidente en funciones es Joan Saura. Finalmente, la Plataforma en Defensa de la Venta no Sedentaria para Cataluña también mostró su «absoluto rechazo» a esta tolerancia con los «manteros», y aseguraron que «fomenta la competencia desleal».