El juez envía a prisión a 4 de los 5 presuntos miembros de Resistencia Galega

Así lo ha ordenado el magistrado después de tomar declaración durante dos horas y media a los acusados, a dos de los cuales, Eduardo Vigo Domínguez y Roberto Rodríguez Fiallega, imputa los delitos de pertenencia, falsificación de documento oficial, tentativa de estragos y tenencia de explosivos, han informado fuentes jurídicas.

Mientras, a Antón Santos Pérez y María Osorio López sólo les imputa los dos primeros y a Jessica Rodríguez la ha dejado en libertad sin fianza con la obligación de prestar comparecencias mensuales, si bien le mantiene los cargos por pertenencia.

Todos ellos se han negado a declarar ante Velasco excepto Antón Santos y Jessica Rodríguez, que han asegurado ser independentistas pero han insistido en que no saben nada sobre los hechos de los que se les acusa, han precisado las fuentes.

En los registros efectuados tras su detención el pasado miércoles, a Vigo se le incautaron tres artefactos explosivos que, según el juez, le había entregado Rodríguez, en cuya casa se encontró escondida en un trastero una mochila con un artefacto de dos kilos listo para explotar y documentos y carnés de conducir de todos los acusados, excepto de la mujer que ha quedado en libertad.

Además, en otra de las viviendas registradas se halló el comunicado de cese de la violencia anunciado por ETA el pasado 20 de octubre, han precisado las fuentes.

Según las primeras pesquisas, los detenidos, a los que el magistrado ha ordenado practicar pruebas de ADN, planeaban un atentado coincidiendo con la celebración del día de la Constitución mañana y se les considera autores de los perpetrados con artefactos explosivos e incendiarios en las últimas fechas contra objetivos políticos, sociales y económicos de Galicia.

La operación se inició el pasado miércoles, cuando fueron detenidos Vigo -que portaba en su vehículo tres pequeños artefactos con un peso total de 5,8 kilos de material explosivo-, Roberto Rodríguez y Jessica Rodríguez junto a Catalina Alonso, aunque ésta última quedó en libertad tras pasar tres días arrestada.

Posteriormente, el sábado, a los arrestos se sumaron los de Antón Santos -que portaba un ordenador portátil y un lápiz de memoria- y María Osorio en Lugo.

Durante el registro realizado en el domicilio de ambos en Lugo, se intervinieron otro ordenador portátil, un lápiz de memoria, una cámara fotográfica y tres teléfonos móviles.