Roma

«A los antitaurinos les duele que la fiesta sea la imagen de España en el exterior»

El diestro arrancó los aplausos de los asistentes a su homenaje en la sede de LA RAZÓN con una apasionada y poética defensa de la tradición 

El diestro respondió a las preguntas de Gloria Lomana, directora de informativos de Antena 3; Javier González Ferrari, presidente de Onda Cero; Albert Montagut, director del diario ADN; y Francisco Marhuenda, director del diario LA RAZÓN
El diestro respondió a las preguntas de Gloria Lomana, directora de informativos de Antena 3; Javier González Ferrari, presidente de Onda Cero; Albert Montagut, director del diario ADN; y Francisco Marhuenda, director del diario LA RAZÓNlarazon

Tras su intervención inicial, el diestro respondió a las preguntas de cuatro periodistas: Gloria Lomana, directora de informativos de Antena 3; Javier González Ferrari, presidente de Onda Cero; Albert Montagut, di- rector del diario ADN; y Francisco Marhuenda, director del diario LA RAZÓN. Aunque el torero evitó la polémica en su discurso, los periodistas invitados centraron sus preguntas en la posible prohibición de la fiesta en Cataluña y el debate que ha generado esta medida en todo el país.

–GLORIA LOMANA: Quería felicitar al maestro por el buen rato que nos ha hecho pasar y por la defensa tan bella que ha realizado de la fiesta. Pero no soplan buenos tiempos. Usted mismo ha dicho que a los antitaurinos no les interesan los toros, sino romper un símbolo cultural. ¿Qué símbolo? ¿Cree que detrás de este movimiento se esconden otros problemas políticos?

–ENRIQUE PONCE: El movimiento antitaurino en Cataluña tiene tintes políticos absolutamente. Parte de ahí porque el toreo es la imagen de la cultura y la tradición española en el exterior, y eso les duele y les hiere, por eso arremeten contra nosotros. Aquellos que están contra los toros son los nacionalistas, no son ni el PP ni el PSOE, porque hay muchos aficionados entre sus filas, no como en Esquerra Republicana de Cataluña. No es algo nuevo, sino que existe desde hace unos años y ha ido cogiendo fuerza. Por otra parte, el antitaurino no político lo es por desconocimiento, pues va en defensa de un animal cuando van a lograr, sin quererlo, su sepultura. El toro bravo es un animal que nace y se cría para la corrida. Respeto su ideología, pero no que quieran prohibirlos. El toro bravo es un animal único y los únicos que de verdad lo defendemos somos los aficionados, toreros y ganaderos que lo cuidamos y vivimos por y para él. Cuando no se conoce a un animal como el toro se le compara con otros domésticos, pero el toro no es como los demás: ha evolucionado a través de la selección que hace el ganadero y sólo existe para las corridas de toros.

–G. L.: La primera corrida documentada en Cataluña es del siglo XIV. A principios del siglo XX, Barcelona llegó a tener cuatro plazas de toros. ¿Cree que la afición se puede acabar con una ley, si finalmente lo prohíben?

–E. P.: Creo que no. El toreo es parte del pueblo. Se trata de la fiesta popular más arraigada y es identidad de España porque el pueblo lo quiere. En Barcelona no se van a prohibir. Sería una locura que se hiciera y ya lo es también sólo el plantearlo. Estaríamos borrando una parte de nuestra historia, algo así como si se cerrara el Museo del Prado. Deberían tener la paciencia suficiente, porque si de verdad no interesa dejará de ser rentable y no se organizarán más corridas.

–JAVIER GONZÁLEZ FERRARI: No soy un aficionado, pero sí muy partidario. Tuve la oportunidad de conocer al cantaor José Menese al que Rafael Alberti le escribió un poema desde Roma, donde estaba exiliado, tras escucharle cantar, en el que había un verso: "Ese toro metido en las venas que tiene mi gente". No sé si ha visto la portada de hoy de LA RAZÓN, en la que ZP y Rajoy posan con una camiseta de la selección, ¿le gustaría una portada así con un capote?

– E. P.: La señora presidenta (por Esperanza Aguirre) ya lo hizo una vez. Tengo que decir que el PP se ha mojado más, especialmente en Madrid y Valencia. Nos gustaría que todos los partidos apoyaran la Fiesta Nacional porque forma parte de nuestra historia y de nuestra tradición. Si no lo hacen es por miedo a esa minoría, y ya se sabe que las minorías en España mandan mucho.

–JAVIER GONZÁLEZ FERRARI: A lo mejor si lo llamáramos Fiesta Estatal...

–E. P. : Eso me parecía el colmo. Si es de España, es de la nación. No sé porque cuando se ve una bandera española la gente se pone a temblar. Es algo que la gente de mi generación no comprendemos.

–J. G. F.: Hace unos días, durante el debate parlamentario sobre la fiesta en Cataluña,TVE emitió un documental en el que se decía que la fiesta está en decadencia y que se suspenden corridas. ¿Está de acuerdo?

– E. P. : La fiesta goza de un momento importante. El toro bravo está a un nivel muy alto. Se ha depurado más si cabe. También hay un plantel de toreros muy variados en su forma de sentir y expresar. No creo. Se suspenden corridas porque estamos atravesando un momento de crisis económica que llega a todos los sectores y el toro también se lleva su pellizco. Creo que esto va afectar especialmente a los pueblos más pequeños, donde en vez de una feria de tres o cuatro corridas se hará sólo una por cuestión de presupuesto. La grandes ferias, que ya están consolidadas, no van a sufrir. Ya lo hemos visto este año en Olivenza, Castellón, Valencia, Sevilla y Madrid, donde ha habido grandes llenos. Además, acude mucha gente joven, al menos es lo que veo en los tendidos. Es cierto que se podría fomentar más la fiesta, por ejemplo creando aulas taurinas en las universidades como las que existen en Córdoba, Madrid, Valencia y Granada. Allí se habla de toros, se dan conferencias, yo mismo he participado, y uno encuentra a chavales interesadísimos por la fiesta con una afición tremenda. Es una iniciativa que se debería generalizar para dar a conocer realmente el fundamento de este arte.

–ALBERT MONTAGUT: Más allá de la polémica política y social, la palabra «moderno» ha dejado de existir y siempre llega otra cosa que la cambia y que la supera. Póngase en un escenario social de dentro de unos años. ¿Cree que los toros serán un anacronismo? ¿Cree que la fiesta de los toros en este nuevo mundo diferente va a tener cabida?

–E. P.: Creo que la esencia de la fiesta de los toros es ese anacronismo. Es bonito y es un escape que en un mundo lleno de modernidad y de técnicas nuevas vayas a ver una corrida de toros y te atrape en el tiempo. Esa es una de las esencias y seguro que en el siglo XIX pensaban que en el XXI dejaría de haberlas, pero aquí seguimos. Poco ha cambiado la vestimenta y eso me gusta: es una de las esencias, de la magia, que mantiene ese ritual. Son las costumbres y el respeto que existe por eso, por tus antecesores, sigue existiendo en el toro y en muy pocos otros ámbitos. Eso es lo bonito. Sería precioso que en el siglo XXX todavía se vista un hombre con un vestido de luces y se ponga delante de un toro y se juegue la vida. (Aplausos de la sala). Crear una obra de arte efímera en un instante, en un lance, en un segundo, mientras eso siga existiendo, el toreo será eterno por los siglos. Estoy convencido de eso. (Más aplausos)

–A. M.: Hace una semanas, la cornada a Julio Aparicio dio la vuelta al mundo y fue primera página en los periódicos más importantes. Es un lance negativo pero muy espectacular ¿Perjudica a los toros? ¿Perjudica a España?.

–E. P.: Creo que vista desde fuera, es difícil que un alemán comprenda el significado del toreo y pensarían que estamos locos. Pero, a la vez, engrandece la verdad de la fiesta y la crueldad, que también la tiene. En el escenario del ruedo se muere de verdad. Lo de Julio fue un milagro y otros no han tenido esa suerte. A los pocos días queremos volver. No es que seamos de una pasta diferente, es que tenemos mucha fuerza interior.

–FRANCISCO MARHUENDA: En LA RAZÓN somos taurinos por devoción y convicción. Y los antitaurinos son una minoría muy pesada e insistente, pero ¿qué siente cuando la presencia de los niños está mal vista o la utiliza como excusa TVE para no retransmitirla cuando las películas y los videojuegos son mucho más violentos?.

–E. P.: Creo que es una tontería más del antitaurino. He crecido viendo al toro. Desde que tengo uso de razón, mi abuelo me llevaba a la plaza y lo vas interiorizando. Es algo natural y me considero una persona que no es violenta, y en los partidos de fútbol los aficionados se pelean, pero la gente de los toros no puede ser más correcta. Creo que los niños deberían verlos como algo natural, como algo que forma parte de nuestra tradición y cultura, debería ser obligatorio.

–F. M: Hemos tratado ya la visión del toreo y de la cultura, pero ¿qué relación siente el matador con el toro en el ruedo? Y usted que es padre, ¿piensa en su mujer y su hija cuando está en la plaza?

–E. P.: No hay nada comparable con pegarle un par de muletazos a un toro. No me parece que exista nada igual, esa sensación de someter a un animal con tanta fuerza bruta y verlo pasar. Parece un milagro. No dejo de sorprenderme, que un animal así sea tan puro, y que siga un trapo desde ahí (señala a un lado) hasta allá (señala al otro). Nunca te acostumbras al miedo que pasas en las horas previas, porque en tu cabeza se juntan una incertidumbre por el fracaso, que se suma al miedo a que te cojan o te maten, y todo eso ocurre en el cerebro en apenas milésimas y milímetros. Ahí es cuando sientes que la vida pende de un hilo pero nunca pienso en eso. Pienso en hacer arte. Veo el toreo como una expresión artística inigualable. Trato de crear belleza con lo que hago. Y mi pensamiento es ver pasar ese toro, por aquí y por aquí. (Aplausos de la sala).