Italia

Berlusconi diseña una reforma judicial que separa las carreras de jueces y fiscales

Crea una corte «disciplinaria» que será elegida en parte por el Parlamento

El primer ministro italiano declaró ayer que la reforma judicial introduce «los cambios que quería realizar desde 1994»
El primer ministro italiano declaró ayer que la reforma judicial introduce «los cambios que quería realizar desde 1994»larazon

ROMA- Silvio Berlusconi por fin acaricia una de sus grandes aspiraciones: meter en cintura a los jueces, un sector del Estado, en su opinión, demasiado independiente y peligroso por su capacidad para interferir en la política. El Consejo de Ministros aprobó ayer un decreto ley que, de ser aprobado en el Parlamento, donde «II Cavaliere» y sus aliados tienen mayoría, supondrá una reforma histórica de la Justicia en Italia. «Desde 1994 quería realizar estos cambios, que constituyen un punto fundamental de nuestro programa», reconoce el primer ministro italiano.

El nuevo diseño del Poder Judicial realizado por Berlusconi contempla la separación en la carrera de jueces y fiscales, que tendrán también dos Consejos Superiores diferentes. Por encima de estas instituciones se creará una Corte de disciplina, que vigilará que no realicen actos de naturaleza política y que cumplan la Constitución. La mitad de los miembros de este organismo regulador serán elegidos por el Parlamento. Deberán ser profesores universitarios de materias jurídicas y abogados con más de quince años de carrera. La elección de la otra mitad de la Corte correrá a cargo de los jueces y fiscales.

Esta participación del Parlamento en la elección del órgano que controlará a los magistrados colma la satisfacción de Berlusconi de someter a la Justicia al poder político. La reforma incluye otro elemento muy criticado por los jueces. Con el nuevo reglamento deberán pagar de su propio bolsillo los errores que cometan en el ejercicio de su profesión. Ya no les cubrirá el Estado, como sucedía hasta ahora.