Crítica de cine

CRÍTICA DE CINE / «Megamind»: El buen villano

Director: Tom McGrath. Guión: Alan Schoolcraft y Brent Simons. Voces originalesn: Will Ferrell, Tina Fey y Brad Pitt. EE UU, 10. Duración: 108 min. Animación.

«Megamind»: El buen villano
«Megamind»: El buen villanolarazon

«Megamind» tarda poco más de media hora en formular lo que «El protegido» tardaba dos: que no hay Mal que por Bien no venga. «Megamind» es al universo superheroico lo que «Shrek» es al universo del cuento infantil: a partir de la inversión moral de la figura del villano se pone en práctica la deconstrucción del «dramatis personae» de un lenguaje tan fuertemente codificado como el del tebeo superheroico. Megamind (Will Ferrell) y Metro-Man (showman divertidísimo al que pone voz Brad Pitt) son las dos caras de una misma moneda, dos alienígenas que educan sus superpoderes y su sentido de la ética según el medio social donde les ha tocado crecer (una prisión y una mansión millonaria, respectivamente). Su confrontación definitiva se produce muy pronto, convirtiendo el vacío que provoca la repentina desaparición del Bien en el tema rector de la película. La fórmula es manida, pero tiene sus momentos. Que Megamind pueda transformarse en un gafitas seudointelectual para seducir a la periodista que ha hecho de su vida una cruzada contra su maldad ofrece algunos gags de notable eficacia. Dudamos de que algunas de las bromas –Megamind imitando a un Corleone sideral– calen en el público infantil, pero el notable diseño de personajes –especialmente el colega de Megamind, pez monstruoso enfundado en coraza de robot– y el inteligente uso de las 3D dan un empaque al filme que compensa su falta de originalidad.