Vacaciones

El ocaso de San Juan

Montañas de basura se acumulan en los alrededores de los 14 kilómetros de «playa» del pantano. Asociaciones ecologistas y hosteleras reclaman un aumento de los servicios de limpieza en verano

Mientras que los contenedores de basura y papeleras están a medio llenar, los restos de «botellones» y barbacoas invaden su entorno
Mientras que los contenedores de basura y papeleras están a medio llenar, los restos de «botellones» y barbacoas invaden su entornolarazon

MADRID- Conocido como la «playa de Madrid», el pantano de San Juan –a 84 kilómetros de la Puerta del Sol– es el único embalse de la Comunidad en el que está permitido el baño y la navegación a motor. Cada verano, centenares de madrileños superan las altas temperaturas en sus aguas y «matan» el tiempo libre en sus zonas recreativas, kioscos, chiringuitos, y diversas instalaciones para el deporte náutico y alquiler de embarcaciones.

Pero este tránsito de excursionistas empieza a pasarle factura a su entorno natural. Así lo denunció ayer la asociación Globalízate con la publicación de un informe en el que pone de manifiesto la «degradación» de la zona del Muro, o la «playa» del pantano, debida a «la actitud incívica» de sus visitantes. Restos de «botellones», pañales, botellas de plástico y vidrio o colillas proliferan bajo los árboles y junto a las zonas de aparcamiento. Unos restos que, tal y como denuncia la asociación, pueden ser «potencialmente peligrosos tanto para los visitantes como por el riesgo de incendio forestal que pueden provocar en esta Zona de Especial Protección de Aves (ZEPA)». A esto además se une la existencia de restos de basura orgánica que con el calor desprenden mal olor. Y todo ello, subraya Globalízate, a pesar de que las papeleras y contenedores se encuentran a medio llenar.
 
El embalse de San Juan se utiliza para abastecimiento de agua a la zona suroeste de la región madrileña, así como para la generación de energía eléctrica. Por ello, y para la conservación de su valor medio ambiental, esta asociación, junto a otras entidades ecologistas y hosteleras, reclaman un aumento de los servicios de mantenimiento y limpieza del pantano (que cuenta con 14 km. de playa), durante el verano, así como la colocación de carteles en los que se conciencie a los visitantes de la importancia de la conservación de la zona.