La Junta seguirá a las demás regiones socialistas y subirá los impuestos

SEVILLA- Cataluña, Baleares y Asturias ya han anunciado subidas del tramo autonómico del IRPF para las rentas superiores a 120.000 euros en el caso catalán y de 100.000 en las otras dos regiones socialistas. Andalucía seguirá el guión marcado por el PSOE y buscará subir la fiscalidad «a los ricos» para que contribuyan en mayor medida al sostenimiento de las arcas públicas.El presidente de la Junta de Andalucía, José Antonio Griñán, reconoció ayer en una entrevista en Onda Cero que anunciará las nuevas iniciativas fiscales el próximo miércoles en el Debate sobre el Estado de la Comunidad, pero que su Gobierno está «especulando sobre ésta y varias medidas». Horas antes, la consejera de Presidencia y portavoz del Gobierno andaluz, Mar Moreno, reconoció en un desayuno informativo que la subida del tramo autonómico del IRPF «no está descartada» y que se va a «explorar ese terreno». Las opciones para aumentar la fiscalidad con las que cuenta la Junta de Andalucía no se reducen al impuesto sobre la renta. El impuesto de sucesiones, la denominada fiscalidad verde, el impuesto de matriculación, las tasas vinculadas a la construcción residencial –impuesto de transmisiones patrimoniales y actos jurídicos documentados– o la eliminación de deducciones autonómicas son esas otras vías que están en fase de estudio. De hecho, no sería la primera vez en un breve periodo de tiempo que la Junta de Andalucía decide acometer una subida impositiva. En el primer pleno del Parlamento del actual periodo de sesiones –el 17 de febrero–, Griñán anunció una leve reforma tributaria que incluía subida en el Impuesto de Transmisiones Patrimoniales del siete al ocho por ciento en inmuebles de más de 400.000 euros, garajes de más de 30.000 o todoterrenos de más de 15CV de potencia fiscal. Como también incluyó deducciones, especialmente para autónomos, el saldo neto previsto de la reforma tenía un coste de unos siete millones para la Administración andaluza. En esta ocasión, se potenciará la vía de los ingresos.Andalucía también seguirá las directrices del PSOE en la anunciada reforma laboral del 16 de junio. En la misma entrevista radiofónica, Griñán aceptó abiertamente una rebaja en la indemnización por despido de 45 a 33 días: «No suena mal», fue la respuesta del presidente, que hasta ahora se había mostrado en contra de esta propuesta.