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11-M ensayo 29-M huelga general
MADRID- «Compañeros y compañeras». Media hora antes de la hora prevista de convocatoria, las siete, un hombre subió al atril preparado por CC OO y UGT y apeló a los pocos «compañeros» que en ese momento se encontraban en la plaza de Sol. «Ya empezamos con lo de compañeros y compañeras» se quejaba una mujer de las allí presentes. El presunto motivo de la manifestación (la reforma laboral) tenía calado, pero quienes la convocaban no. No, porque una hora después de haber comenzado, un círculo se abrió justo en medio de la plaza. Mientras que los sindicalistas de UGT y CC OO ondeaban sus banderas al ritmo de las palabras de José Ricardo Martínez y Cándido Méndez, una multitud rodeaba a unos jóvenes que con un micrófono y unos altavoces coreaban consignas que la gente sí compartía. Sí, porque acallaban las palabras de los dirigentes de los sindicatos, y sí, porque esas mismas personas recriminaban a esos mismos dirigentes que «Cuántos recortes hacen falta más "pa"convocar una huelga general». Una huelga general que tiene como fecha prevista el 29 de marzo, o al menos ese era el deseo colectivo, aunque Cándido Méndez diga de cara al público que prefiere darle una oportunidad a «la negociación». Por si a los grandes sindicatos les da por flaquear, los manifestantes no dejaban de azuzarles al grito de «hace falta ya una huelga general».
Estaba convocada una concentración contra la reforma laboral y eso es lo que fue. Nadie se acordó de Valencia y unas pocas camisetas verdes fueron los únicos testigos de los recortes en la Educación. Algunos incluso parecían bromear con las cargas de la Policía del pasado lunes coreando «Violencia es no llegar a fin de mes». Los reunidos tenían un perfil muy definido. Muchos más hombres que mujeres y muchos más mayores que jóvenes. Jóvenes que se criticaban a sí mismos: «Eran más solidarios en Barcelona y en Valencia, aquí nada»
Los cánticos de lo más variopinto, como siempre. Los hubo que aconsejaban de economía –«Con esos recortes baja el consumo y sube el paro»–, que intentaban presagiar el futuro –«Mariano, Mariano no llegas al verano»– e incluso que recomendaban trabajos alternativos –«Urdangarín a currar al Burger King»–.
Llamativa la ausencia de Ignacio Fernández Toxo, que llevó a Bruselas sus reivindicaciones. Por eso en Sol estuvo como representante de CC OO José Ricardo Martínez, secretario general de Madrid. Por el otro lado, por el de UGT, Cándido Méndez, que no quiso hacer constar su opinión sobre la concentración con este medio en particular. Pero ésa es otra historia.
El próximo día 11 está planificada una nueva convocatoria contra la reforma y los recortes. Mal día para convocar una protesta. Al menos para las víctimas, que en ese jornada tendrán otras cosas en las que pensar más que en recortes y reformas. Esa fecha podría ser un ensayo de lo que ocurrirá dentro de un mes en caso de que la hipotética huelga general tenga lugar. Aunque si lo de ayer fuese un ensayo del ensayo del próximo día 11, los agoreros del «Mariano, Mariano no llegas al verano» dirían que el poder de convocatoria será escaso, porque ayer la plaza dejaba ver grandes lagunas y, aunque el tráfico estaba cortado, la gente podía pasar tranquilamente. Pero de nuevo, eso será otra historia.
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