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Casi la mitad de los menores ve la televisión entre las 10 y 12 de la noche

Cerca de la mitad de los menores ve la televisión entre las diez y las doce de la noche, fuera del horario infantil, y en muchos casos con permiso paterno. Así lo indica un estudio encargado por la Oficina del Defensor del Pueblo a UNICEF, que ha analizado los hábitos de más de 3.000 chicos de entre 12 y 18 años.

Un 44 por ciento de los menores ve la televisión entre las 10 y las 12 de la noche, que es asimismo su "franja horaria preferida". Otros resultados del estudio indican que el 14 por ciento de los adolescentes ha quedado alguna vez con amigos a los que sólo conoce a través de la Red, mientras que el mismo porcentaje ha recibido ofertas sexuales.

Los chicos de entre 12 y 18 años consideran estar preparados para muchos contenidos que censurarían a sus hermanos pequeños. El estudio también señala que la mitad de los menores considera que la programación que emiten las cadenas a esa hora es "apropiada"para ellos, aunque "no respetan los códigos de autorregulación".

El mismo porcentaje considera que la programación televisiva "no colabora en su educación", mientras que el 35,1 por ciento afirma que sus padres "nunca"controlan lo que ven, y cuando lo hacen, suelen vigilar el tiempo (57,8%), no los contenidos (45%).

Así lo explicó en rueda de prensa la Defensora del Pueblo en funciones, Maria Luisa Cava de Llano, la presidenta del Comité Español de UNICEF, Consuelo Crespo, y el adjunto segundo de la Defensora, Manuel Aguilar Belda.

El estudio señala que más de la mitad de los chavales entre los 12 y los 18 años cree que durante la franja protegida se ofrecen contenidos que incitan a la anorexia, la bulimia y el consumo de alcohol y tabaco. Además, el 33 por ciento afirma que se discrimina a las mujeres, un 42 por ciento denuncia que hay contenidos violentos, un 48 por ciento contenidos sexuales y seis de la cada diez reconocen que se fomentan "contravalores", como el consumismo o el éxito fácil.

Además, la mitad de esos chicos considera que la programación televisiva "no colabora en su educación"y critican muchos "gestos y lenguajes"que en su opinión llegan a ser "ofensivo e insultante". En todo caso, los jóvenes pasan ante el televisor más de dos horas al día de media en las jornadas lectivas y más de tres durante los fines de semana. Un 70 por ciento de los menores asegura que se consideran capaces de elegir los contenidos que más les convienen.

Despreocupación de los padres
La profesora de la Universidad Autónoma de Madrid y coautora del estudio Esperanza Ochaíta, ha afirmado que lo "importante"es que los menores sepan qué es lo que están viendo en televisión. "Todos somos conscientes de que hay contenidos que no aportan nada bueno y sin embargo, los vemos", ha señalado. En este sentido, ha destacado que igual que ocurre en los mayores, los chicos de entre 12 y 18 años consideran estar preparados para muchos contenidos que censurarían a sus hermanos pequeños.

El 35,1 por ciento afirma que sus padres "nunca"controlan sus hábitos de consumo televisivo, algo que sí hace el 35,8 por ciento de los progenitores. No obstante, cuando existe control parental, recae fundamentalmente (57,8%) en el tiempo dedicado y no sobre los contenidos (45%), aunque se controla más el contenido de la programación cuando la ven niñas que cuando la ven niños y a éstas se les permite con menos frecuencia saltarse el horario protegido.

Estos porcentajes contrastan con el hecho de que más de la mitad de los encuestados considera necesario controlar la programación televisiva que ven los chicos de entre 12 y 18 años. Más de dos tercios de los menores considera que sería aconsejable ejercer ese control sobre los niños de menor edad.

Cava de Llano ha señalado, a la vista de los resultados, que es imperativo poner a funcionar el Consejo Estatal de Medios Audiovisuales, además de crear autoridades independientes en las comunidades autónomas que aún no dispongan de ellas. Además, considera que los poderes públicos deben "perseguir"la emisión de contenidos inadecuados en horario infantil y promover la inclusión en los planes de estudio de materias relativas a los medios de comunicación para fomentar el correcto uso por parte de los adolescentes.

Amigos en internet

La Defensora del Pueblo ha mostrado su preocupación por la posibilidad de que se esté creando una "generación búnker", compuesta por adolescentes que se encierran en su habitación para conectarse a internet durante horas. Estos jóvenes se "aíslan"de su familia, de la que en muchos casos les separa una "importante brecha digital".

El estudio refleja que los chicos entre 12 y 18 años están "enganchados"a internet y, en concreto, a las redes sociales, a las que acceden sin ningún control de sus padres en un 35,5 por ciento de los casos. En este sentido, destacó que el 42 por ciento reconoció tener amigos a los que sólo conoce de la red y un 14 por ciento ha quedado alguna vez con esas personas.

En este sentido, la defensora y la responsable del Comité Español de UNICEF expresaron su "preocupación"por el hecho de que el 14 por ciento de los adolescentes ha recibido propuestas sexuales a través de internet y un 11 por ciento, insultos o amenazas. Además, el 64 por ciento del total, publica imágenes privadas o ajenas.

Para los responsables del estudio, las autoridades competentes deben impulsar la formación de los padres a fin de eliminar la brecha digital respecto de sus hijos, así como promover actuaciones para identificar los riesgos que ofrece internet, habilitar "mecanismos sencillos"de reclamación y herramientas adecuadas para la prevención.