La gran banca participará en el pago a los proveedores

Madrid- El Gobierno ultima estos días la constitución de un consorcio bancario, con presencia del ICO, para convertir en realidad en tan sólo unas semanas el abono a los proveedores de las facturas pendientes de pago de las administraciones públicas. Para ello, está sondeando a las principales entidades financieras del país (Santander, BBVA, La Caixa y Bankia) para constatar su voluntad de participar en este plan de liquidación inmediata de las deudas autonómicas, locales y estatales, según confirmaron a LA RAZÓN fuentes gubernamentales. Mientras, la secretaria de Estado de Presupuestos dio ayer por hecho que «esta gran operación financiera» contará con las entidades bancarias «más importantes del país».

Este consorcio podría saldar deudas públicas por un importe de entre 20.000 y 30.000 millones de euros. Se calcula que la deuda comercial de las administraciones asciende a 40.000 millones, de los que 15.700 millones corresponden a servicios prestados por proveedores sanitarios.

El Estado ejercerá de avalista de las operaciones del consorcio bancario y deducirá, probablemente, a la administración correspondiente el importe prestado de las transferencias a cuenta que le realice. Una vez se apruebe este nuevo procedimiento, los proveedores podrán acudir a las entidades financieras y pactar el cobro de las facturas a cambio de un descuento del total adeudado aún por determinar.

Además, se mantienen las líneas ICO de hasta 15.000 millones para las autonomías y se aprobará este viernes otra para los ayuntamientos. Así, el proveedor podrá acogerse para recuperar su dinero o al consorcio bancario o al ICO, cuya maquinaria es más lenta a la hora de garantizar el pago.

El ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, confirmó ayer que el Consejo de Ministros bendecirá este plan este viernes. Sin embargo, otras fuentes gubernamentales consultadas por este diario consideraron prematuroasu aprobación. Con independencia de cuándo se produzca, este sistema permitirá liquidar la inmensa mayoría de las deudas públicas a lo largo del mes de marzo y abril. Además, no repercutirá en el déficit público, al estar contabilizadas con anterioridad estas facturas. Eso sí, computarán las que permanezcan en los cajones sin contabilizar. No obstante, por los cálculos de Montoro, la cuantía que se espera que aflore será pequeña. Según el ministro, «tendrá una gran importancia» la movilización de recursos para pagar a los proveedores.

La morosidad que afecta a autónomos, pymes y grandes empresas «es muy alta» y ha sido una de las causas que ha provocado muchos cierres empresariales. Una vez que se solvente este problema de impagos, el Ejecutivo considera «fundamental» que se corrija el desequilibrio presupuestario que está en el origen de los retrasos en los pagos, según el titular de Economía y Competitividad.

Este plan mereció ayer el aplauso de autónomos, pymes y grandes empresas. De hecho, las cuatro mayores subidas del Ibex corrieron ayer a cargo de las constructoras FCC, que ganó un 9,58%; Sacyr Vallehermoso, un 3,33%; ACS, un 2,69%, y OHL, un 2,27%. Mientras, la farmacéutica Grifols subió 0,46 puntos.