Nueva York
LA RAZÓN recompensa al héroe de 2010
La crónica de este 2010 que encara su final nos ha dejado historias de generosidad, entrega y, en definitiva, de todos aquellos valores que conforman el heroísmo. LA RAZÓN quiere recompensar a la persona más valerosa con la concesión del Premio Alfonso Ussía al Héroe del Año. ¿Los requisitos? Haber llevado a cabo una acción altruista en territorio nacional hacia terceros.
Éste fue el caso de Harold y Juan, los dos protagonistas de una historia que ocurrió a principios de año en la madrileña calle Alcalá, concretamente en el distrito de Ciudad Lineal. El relato tiene como escenario una tienda de comestibles. Arturo, padre de Harold, un chico de 16 años, dejó momentáneamente a su hijo a cargo de la tienda. No estaba solo, porque también le acompañaba su amigo Juan, de la misma edad. Era algo rutinario. No podían imaginarse que su vida iba a correr serio peligro. «Para cinco minutos que me tenía que quedar...», recordaba Harold.
Harold se encontraba limpiando el lavabo del comercio mientras Juan se hacía cargo de la caja. Entonces, un encapuchado de unos 20 años, que estaba bajo los efectos de las drogas, entró en el local y encañonó a Juan con una pistola. «Abre la puta caja», le dijo. Le pidió todo el dinero que tenían guardado, pero se resistieron a ceder.
La situación se complicó. Después de que Harold saliera del baño para ver qué ocurría, una clienta quiso entrar en el local, algo que aprovechó el asaltante para intentar tomarla como rehén. Entonces, Harold y Juan forcejearon con él y pudieron liberar a la mujer. Así, lograron salir del local y dejaron al ladrón encerrado dentro de la tienda. «Ahí comenzó a tirar latas y la silla hacia la puerta para romper el vidrio», relataba Harold. Ante el notable revuelo, una patrulla policial que pasaba por allí se acercó a la tienda. Cuando los agentes vieron que había una persona armada, apartaron a los chicos, pero el atracador había conseguido salir y echó a correr.
No le denunciaron
Unos metros después, el tipo fue neutralizado por los agentes. Sólo había conseguido llevarse 20 euros. Y además, después descubrieron que la pistola era de plástico. Al final, optaron por no denunciarle: «Cuatro años de cárcel por 20 euros... No sería justo», decía Harold.
Con todo, Arturo, su padre, se llevó un susto de muerte. De hecho, tenía previsto instalar cámaras de vigilancia para reforzar la seguridad del local.
Acciones como ésta pueden ser presentadas por los propios candidatos, o bien por terceras personas, en el siguiente microsite: www.larazon.es/premiosussia. Posteriormente, un jurado de LA RAZÓN elegirá al ganador de entre todos los candidatos. Quedarán excluidas todas aquellas personas que, por su profesión, presten servicios de asistencia a la comunidad –Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, personal sanitario al servicio de la Administración Pública, bomberos, etc.–, siempre que los actos hayan sido realizados en el ejercicio de su profesión.
El premio consistirá en un viaje para dos personas de una semana –seis noches, siete días– a Nueva York. Además, el vencedor recibirá una estatuilla en la gala de entrega de los Premios Alfonso Ussía, que se celebrará el próximo mes de noviembre en la sede madrileña del periódico.
Así, LA RAZÓN busca un sucesor a Joaquín García-Cuevas, el ganador de la II Edición. Docente y concejal del PP en el Ayuntamiento de Puertollano (Ciudad Real), Joaquín, de 50 años, pasaba las vacaciones junto a su familia en una playa marbellí. Sin embargo, mientras vigilaba a sus hijos, notó cómo un hombre de 69 años estaba siendo arrastrado por el mar embravecido. Desafiando al tremendo oleaje y a las rocas, nuestro protagonista se adentró en el agua y logró rescatar al bañista. Así, Joaquín fue propuesto como Héroe del Año por varios testigos de su acción.
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