Ascienden a 16 los detenidos en Valencia por resitencia a la autoridad y desórdenes públicos

A diferencia de las anteriores ocasiones, en las que grupos de sindicalistas se dedicaban a ir comercio por comercio para cerrar aquellos que hubieran decidido no hacer hulega, esta vez son miles de personas las que se han unido a la "procesión".

El denominador común han sido los tensos momentos que se suelen producir en estas jornadas. Gritos, golpes a los escaparates, mesas y sillas de las cafeterías por los suelos, llegando incluso a derramar el café a unas chicas que estaban sentadas en una cafetería. Insultos y proclamas como "si esto no se arregla, guerra, guerra, guerra", han sido constantes a lo largo de toda la mañana, y todavía lo son por las calles de Valencia.

Los momentos de máxima tensión se han producido en las puertas de la delegación del Banco de España y de la central Bankia, cuando decenas de personas con pacartas de "Stop desahucios"han irrumpido en las sedes a gritos de "ladrones"y "asesinos". La Policía Nacional ha acudido enseguida y ha tenido que desalojarlos.

Como siempre, la mayoría de los comercios del centro han permanecido cerrados al paso de los sindicatos, pero posteriormente abren sus puertas.

Seguimiento e incidentes
La delegada del Gobierno en la Comunitat, Paula Sánchez de León, ha confirmado que el número de detenidos ha ascendido a 16 a las doce del mediodía. Todos ellos han sido arrestados por resistencia a la autoridad y desorden público. Además, dos policías nacionales han resultado heridos leves y uno de los detenidos también.

Los altercados se iniciaron a las ocho menos veinte de la mañana donde un piquete informativo de unas 70 personas lanzaron piedras y vallas contra los agentes en el campus universitario de Tarongers. A lo largo de la mañana varios incidentes de las mismas características se han sucedido en Valencia. Hasta el mediodía, 25 ciudadanos habían sido identificados en las tres provincias por cortes de tráficos, lanzamiento de vallas y bloqueos de las cerraduras de varios centros escolares con silicona.

En cuanto al seguimiento, Sánchez de León lo ha cifrado entre un 15 y un 20 por ciento y ha asegurado que se han cumplido el cien por ciento de los servicios mínimos. Por sectores, el automóvil valenciano ha sido el único en el que ha secundado de manera masiva el paro, en torno al 95 por ciento. En el transporte, ha sido medio, de entre el 40 y el 60 por ciento. En el comercio, sanidad, educación y Administraciones Públicas ha sido bajo, entre el 10 y el 40 por ciento. En el metal, el calzado, el textil, y la energía, no ha llegado al diez por ciento. El consumo eléctrico se ha mantenido en los mismos términos que el pasado miércoles y la central nuclear de Cofrentes no ha sufrido la incidencia de la huelga.

La delegada ha mostrado su satisfacción por el cumplimiento de los servicios mínimos y ha pedido que los ciudadanos puedan disfrutar en libertad de la opción que hayan elegido, si trabajar o secundar los paros.