Espíritu de superación por Juan Rosell Lastortras

Podemos estar orgullosos. Nuestra Selección ha demostrado una vez más que somos capaces de llegar muy lejos si nos lo proponemos. Que tenemos las capacidades y el talento necesario para mantener el ritmo o bien para afrontar la adversidad, las críticas, y los obstáculos que encontremos en el camino y salir reforzados de ello. Nuestra élite deportiva, no sólo en fútbol, sino en tenis, baloncesto u otras disciplinas, incluso en ámbitos de nuestra cultura y gastronomía, son grandes embajadores de nuestro país, situándonos en el plano internacional.
La Roja ha hecho historia, se ha convertido en leyenda, y eso se ha conseguido gracias al esfuerzo de un equipo unido, que ha realizado un gran trabajo, intenso, con constancia y convicción. Y lo más importante: con confianza. No siempre hemos salido victoriosos, (un rápido repaso a la historia muestra que los mayores éxitos de la Selección se concentran principalmente en estos últimos cuatro o cinco años) pero incluso en los momentos en los que hemos perdido, el espíritu de superación y la fuerza que ha transmitido el equipo español debe servirnos de ejemplo a los demás, especialmente en esta coyuntura tan negativa que estamos atravesando.

Es un equipo cohesionado, en el que cada uno aporta en función de sus capacidades, que arrima el hombro y trabaja duro para conseguir victoria tras victoria. Un esfuerzo continuo sin dejarse deslumbrar por los aciertos –que, en los últimos años están siendo muchos– ni sumirse en el pesimismo o abatirse ante los errores. Aprender de nuestras equivocaciones para no volver a cometerlas, seguir adelante con tesón, poniendo todo nuestro empeño y asumiendo el riesgo, son aspectos fundamentales para ganar en cualquier situación.

Y con ese mismo espíritu luchan a diario las empresas españolas para superar estos malos momentos y emprender de nuevo la senda del crecimiento, la creación de riqueza y de empleo. Como la Selección, nuestras empresas innovan, se arriesgan –saliendo al exterior–, ya sea vendiendo en otros mercados internacionales, o invirtiendo en el exterior. En estos momentos, más de 120.000 empresas españolas exportan sus productos y servicios; y la inversión española en el exterior registra unas cifras de 550.000 millones de euros. Además, tenemos grandes empresas multinacionales, pertenecientes a sectores como el tecnológico, las infraestructuras, o la energía entre otros, con fuerte presencia internacional, especialmente en América Latina. Ellas también son prueba de nuestro grado de apertura e internacionalización, y de su compromiso con nuestra economía y con nuestro país.

Esfuerzo, compromiso, valentía, trabajo conjunto, talento, afán de superación, etc. Ese es el fundamento de nuestro fútbol, pero también de nuestra cultura empresarial, constituyendo los pilares del emprendimiento. Es imprescindible fomentar entre nuestros jóvenes los valores que demuestra la Selección española en cada partido, en cada competición disputada, porque son los que van a impulsar la evolución de nuestra economía, nuestro país y de nuestra sociedad. Nos jugamos el futuro en ello.

Juan Rosell Lastortras
Presidente de la CEOE