España

El 40 por ciento de los jóvenes de hasta 18 años quiere ser funcionario

La mayoría cree que su salario mensual podría oscilar entre los 1.000 y 1.500 euros

La Razón
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Sevilla- La crisis económica ya se deja notar en las aspiraciones de los jóvenes sevillanos, que van dejando a un lado la cultura emprendedora para aspirar a un puesto de trabajo más estable y seguro. Al menos esto es lo que se desprende de un estudio realizado por la Cámara de Comercio y la escuela universitaria EUSA entre jóvenes con edades comprendidas entre los 16 y 18 años. El 40,32 por ciento de los encuestados considera que en un futuro le gustaría ser funcionario, frente al 30,55 que preferiría ser empresario y montar su propio negocio y el 29,13 que aspiraría a trabajar en una empresa. A pesar de los recortes que está sufriendo el colectivo, ser funcionario es la opción mayoritaria, especialmente en tiempos de apreturas económicas.

En cuanto al sueldo al que aspirarían los estudiantes de enseñanzas medias, los porcentajes son más variables. La mayoría –un 34,9 por ciento– pretende cobrar entre 1.000 y 1.500 euros al mes, un 24,97 por ciento, estima cobrar entre 1.500 y 2.000, el 19,98 más de 2.000 y el 2,62 menos de 700. Unos sueldos, sobre todo los primeros, que en nada se asemejan a los de la mayoría de los universitarios cuando terminan la carrera y acceden a su primer puesto de trabajo. La movilidad es otro asunto que preocupa a los jóvenes, que disponen ahora de una gran oferta de becas durante su etapa académica para completar sus estudios en el extranjero. La preocupante situación económica que vive el país también parece pesar en las opiniones, puesto que un 69,38 por ciento de los encuestados estaría dispuesto a trabajar en otro país una vez concluida su etapa formativa, frente al 30,62 que preferiría quedarse en España.

Sin embargo, sí hay un aspecto sobre el que no parece pesar tanto la crisis, y es la motivación de los jóvenes a la hora de acceder a una carrera. Según el 29,54 por ciento, lo principal es que gusten los estudios, frente al 27,29 que elige una titulación en función de las salidas profesionales. Otras razones que imperan en la elección son poder estudiar en la misma ciudad donde se reside –18,12 por ciento–, que los padres vean con buenos ojos la carrera elegida –13.72– y que permita estar cerca de los amigos y familiares –11,33–.

Otro dato significativo es que cuando se elige una carrera determinada, el alumno no tiene información completa sobre el mercado de trabajo asociado a esos estudios. De esta manera, no se manejan variables importantes como las formas de acceder al trabajo, el salario, el nivel de paro en ese campo profesional, las exigencias de formación necesarias o el entorno geográfico donde poder trabajar.