El médico que salvó a Mouad «muy afectado»

No es fácil ver cómo una mujer embarazada no logra salir de una parada cardiorrespiratoria y que tienes que continuar reanimándola para que le llegue oxígeno y sangre al feto que intentas salvar. Y todo esto, muy cerca de sus amigas, familiares y el marido y padre de la criatura.

El propio jefe de guardia del Summa, José Luis Eimar, explicaba ayer que este tipo de situaciones no ocurren todos los días y son excepcionales. Aún así, y a pesar de la triste historia, el balance en cuanto a la actuación de los servicios de emergencia es más que positivo. Hay que tener en cuenta que se tomaron muchas decisiones en pocos minutos y que hubo que sincronizar, equipos médicos y helicópteros y todo ello en tiempo récord y sin saber si el bebé iba a lograr sobrevivir.

Cuando la UVI móvil del Summa llegó al lugar se encontró a Khadija en parada cardiorrespiratoria. Empezaron entonces las tareas de reanimación cardiopulmonar. Hubo un momento en el que se dieron cuenta de que la joven madre no lo iba a lograr. Tras pedir permiso al padre, practicaron al cesárea en dos o tres minutos.

Mientras, y para que le llegase sangre al feto, reanimaban a Khadija. Cuando nació el bebé, nació también en parada cardiorrespiratoria. Lo intubaron y comenzaron a reanimarle, esta vez, lograron que el pequeño tuviese pulso. Mouad pesó alrededor de tres kilos. Al encontrarse ella en el noveno mes de gestación, el feto era muy maduro. El helicóptero del Summa 112 trasladó en muy pocos minutos al recién nacido al hospital Puerta de Hierro de Majadahonda. Allí ya esperaban al pequeño un grupo de médicos.