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De torres de alta tensión a goles de infarto

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MADRID- La instalación de campos de césped artificial es la inversión más demandada por las corporaciones locales de los municipios de Madrid. Desde 2003, el Plan de Campos Verdes de la Comunidad lleva instalando césped artificial en los campos de fútbol de los municipios madrileños que superan los 1.000 habitantes. Ayer se inauguraba el campo número 100 financiado por la Comunidad en Aldea del Fresno, por lo que se celebró un acto al que acudieron los 90 alcaldes de los municipios beneficiados, que concluyó con un partido amistoso en el que participaron autoridades políticas, miembros de algunos medios de comunicación y ex futbolistas como Sanchís o Gabi Moya.

El Plan de Campos Verdes, que ha contado con una inversión de casi 70 millones de euros, ha sido «todo un éxito que ha demostrado la importancia de invertir en infraestructuras deportivas», según declaró ayer el vicepresidente regional y consejero de Cultura y Deportes, Ignacio González. Y es que, gracias a estos campos, se han multiplicado las horas de práctica deportiva en las instalaciones. Además, económicamente el césped artificial tiene mucho menos gasto de mantenimiento respecto al césped natural, ya que supone un ahorro del 90% de agua, ocasionando, por ende, un deterioro mucho menor del terrero de juego gracias al caucho. Por otro lado, supone una disminución del impacto ambiental.

El coste total de cada instalación gira en torno a los 500.000 euros, por lo que la financiación de la Comunidad ha sido determinante para construir estos 100 campos, a los que se sumarán once más, que serán inaugurados en las próxima semanas.

Sin embargo, este éxito arrastra diversas dificultades relacionadas con el mal estado de los antiguos terrenos de juego. Por ejemplo, en uno de los campos la planimetría del suelo era tan precaria que un jugador situado en un córner apenas podía ver a otro si estaba ubicado en otra esquina. En otros casos, el terreno del que se disponía para la construcción era tan escaso que hubo que construir campos de fútbol 7 en lugar de fútbol 11. Aunque este Plan también ha dejado anécdotas curiosas, como la del municipio de Robledo de Chavela. Las torres de luz que iluminan a los deportistas son las que iluminaron en su día a la Quinta del Buitre. El alcalde de Robledo se las pidió al Real Madrid cuando supo que se trasladaba a Valdebebas, y el club se las regaló. Por su parte, otros campos se encuentran ubicados junto a monumentos históricos, como el de La Herradura, que goza de unas magníficas vistas del inmenso Monasterio del Escorial.