Barcelona

«Hay mucho talento pero se desaprovecha»

La Razón
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GIRONA – Cada uno de los premiados lo es por un motivo diferente; sin embargo, todos son ejemplo de arrojo, innovación, capacidad de superación y carácter emprendedor. «Yo, como buen emprendedor, empecé con un carrito de limonada», bromea Javier Agüera, quien asegura que entre las claves de su éxito cabría destacar «la perseverancia y que, por mucho que el entorno no sea favorecedor, siempre he creído que hasta lo utópico es posible; de hecho crear una marca de telefonía móvil desde España sigue pareciendo utópico a muchos».

Leticia Moreno considera que «hay que apostar por el camino que uno cree correcto, canalizar las ideas para llevarlas a cabo y luchar por ello con ilusión, disciplina y trabajo». En la misma línea, Edgar Vinyals, quien vio la necesidad de crear la Asociación Saräu tras serle diagnosticado un trastorno mental, señala que en su caso fueron esenciales sus «motivaciones personales, una actitud constructiva y la convicción de que es posible».

El caso de la Fundación Marianao es especialmente revelador, puesto que su principal misión es promover la participación ciudadana, facilitar confianza y concienciación de que las cosas se pueden hacer y generar conciencias críticas. «Los jóvenes necesitan formación y si se les ofrecen las oportunidades de participación real, se movilizan», asegura su director, Josep Torrico, quien denuncia que «hay mucho potencial pero faltan oportunidades para desarrollar ese talento juvenil». Según Torrico, «hay que ofrecer plataformas que faciliten esas experiencias y cambiar la cultura de nuestra sociedad, que no cree en la asunción de riesgos», un punto de vista que comparten todos.

Así, Javier Agüera cree que «hay mucho talento pero poca proactividad, por lo tanto, ese talento está desaprovechado». «Un ingeniero español no tiene nada que envidiar en conocimientos a uno de Silicon Valley, pero hacen falta ganas de lanzarse a la piscina». Guadalupe Sabio invita al optimismo a partir de la visión que se tiene de los profesionales españoles de su sector fuera. «Hay mucho talento y nos valoran muy bien fuera. Cuando sales, ves que a los jefes de fuera les gusta tener españoles en el equipo de investigación», señala.

 

Leticia Moreno
Premio Artes
Madrid (1985)
La violinista actua desde los 12 años por todo el mundo. Rostropovich fue su mentor.
Javier Agüera
Premio Empresa
Madrid (1992)
Cofundador de GeeksPhone, que ha producido innovadores teléfonos móviles.
Guadalupe Moreno
Premio Ciencia
Badajoz (1977)
Doctora en Veterinaria, investiga las enfermedades derivadas de la obesidad.
Edgar Vinyals
Premio Social

Barcelona (1985)
Fundó la Asociación Saräu en 2009 para apoyar a personas con discapacidad mental.
Fund. Marianao
Premio Entidad

Sant Boi (1985)
La fundación que preside Xavier Pedrós desarrolla proyectos sociales y educativos.