Martina Klein: «En verano me suelto la melena soy más atrevida»

–¿Qué espera que le pase en las vacaciones y nunca le sucede?
–Que me entren ganas de volver a trabajar.

–¿Es bueno para la pareja que cada uno veranee por su lado?
–Depende. Yo ahora no me separo de la mía ni para ir al baño.

–Se encuentra en un chiringuito con Zapatero. ¿Qué le dice?
–Nada. Silencio absoluto. No estoy contenta con los políticos.

–Hablan de vacaciones austeras. ¿Ha prescindido de algo?
–No. No soy gastona desde hace tiempo.

–¿Le parece indecente gastar dinero en...?
–Hay que gastar con cabeza y sobre todo lo propio, no lo de los demás.

–¿Qué haría si le tocaran 10 millones de euros en la Primitiva?
–Ponerme contenta y meditar sobre lo que me quedo y lo que doy.

–¿El sexo sin amor es una experiencia vacía?
–Sí, pero Woody añade que como experiencia vacía es una de las mejores.

–¿El verano la hace más atrevida?
–Más feliz. Y un poco más atrevida: me suelto la melena.

–Dicen que los veranos ya no son lo que eran...
–Es por la crisis, pero en la costa no se nota. Todo caro y todo lleno.

–¿Tiene nostalgia de algún verano?
–De la infancia: los veranos eran eternos y los padres lo hacían todo.

–En el quirófano las mujeres piden ser más andróginas y los hombres, rasgos más femeninos...
–Seguir los cánones es una esclavitud. Y luchar contra el tiempo, también.

–¿Mira los cuerpos semidesnudos con disimulo?
–No, miro abiertamente.

–¿En qué clava la mirada primero?
–En las nalgas.

–¿Una copa con Dominique Strauss-Kahn?
–No tengo ningún interés.

–¿Lo más hortera de este tiempo?
–Llevar el cuello del polo levantado, como algunos italianos.

–¿Una frase para su camiseta?
–Marilyn: «Si no aguantas mi peor cara, no mereces mi mejor cara».

–¿La deuda soberana es la que deja a deber el Rey cuando no lleva suelto?
–Ojalá fuera eso: estaríamos mucho mejor.