El cuarto intento de contener el derrame también falla

British Petroleum (BP) se ha encontrado con nuevos problemas en su último intento por contener el derrame de crudo en el golfo de México, al atascarse la sierra que tenía que cortar una tubería subterránea, informó hoy la Guardia Costera.El primer corte fue realizado con éxito por la sierra, según ha informado el comandante de la Guardia Costera de EE UU Thad Allen. Pero después el equipo operado a control remoto se atascó. Allen ha señalado que no tiene duda alguna en que pueda realizarse el segundo corte, aunque no está claro lo preciso que será.Allen dijo que la multinacional británica trata de resolver el problema e intentará finalizar el corte de la tubería hoy mismo para instalar después una especie de caja para recoger el crudo encima del sistema de prevención de explosiones (BOP).El sistema consiste en un complejo entramado de válvulas que debía haber sellado el pozo cuando se originó la explosión el 20 de abril. Pero falló y provocó el que se ha convertido ya en la mayor catástrofe medioambiental en la historia de EE UU.BP espera que la caja recoja el crudo que ahora fluye al mar y transportarlo a continuación mediante una tubería a un barco en la superficie. El comandante de la Guardia Costera confirmó que el carburante ha llegado ya al estado de Misisipi y que se han detectado pelotas de alquitrán en Alabama.El presidente de BP rectificaMientras, el presidente de BP, Tony Hayward, pide disculpas por unas declaraciones "irreflexivas"e "hirientes"en las que pedía volver a la vida que llevaba antes del vertido de crudo. En un comunicado ha expresado su malestar por lo dicho: "Pido perdón, especialmente a las familias de los once hombres que perdieron su vida en este trágico accidente. Esas palabras no representan cómo me siento por la tragedia".BP lucha estos días por mantener su imagen después de verse envuelta en el mayor desastre ecológico por un vertido de petróleo de la historia de Estados Unidos.A las pérdidas en los mercados financieros se suman también las críticas directas que ha dirigido contra la compañía incluso el presidente norteamericano, Barack Obama.