Gestores para salvar la cultura

Hablan de equipo y no de individualidades. Los nuevos directores generales de Política e Industrias Culturales y el Libro (María Teresa Lizaranzu); Bellas Artes y Bienes Culturales y de Archivos y Bibliotecas (Jesús Prieto de Pedro), y el del Instituto Nacional de las Artes Escénicas y la Música (Miguel Ángel Recio) fueron nombrados ayer en el Consejo de Ministros con un perfil de gestión técnica que los aúna. Serán los responsables de los principales departamentos dependientes de la Secretaría de Estado de Cultura, después de que las tres direcciones existentes en la anterior legislatura se redujeran a dos con la llegada del PP.

Lizaranzu y el reto de internacionalizar la cultura
Nacida en 1969 en Madrid, María Teresa Lizaranzu estudió Derecho en la Complutense e ingresó en la carrera diplomática en 1997. Tras pasar por diferentes embajadas, actualmente era subdirectora del Magreb en el Ministerio de Asuntos Exteriores. El buque insignia de las subdirecciones generales tendrá a su cargo la gestión de la Propiedad Intelectual y la promoción de España en el exterior (de ahí el perfil elegido). Desde el sector del libro se valora «positivamente» la elección y «la apuesta por tecnificar cargos y huir de perfiles políticos».

Recio: una apuesta por la Orquesta Nacional
Era hasta ayer director gerente de la fundación Colección Thyssen-Bornemisza (es dilatada su experiencia en Patrimonio Nacional) y asegura que «su experiencia en la gestión ha pesado a la hora de elegirme, ya que era el deseo del ministro y del secretario de Estado de Cultura: un equipo compacto consciente del difícil momento que atravesamos», declara. Ilusionado y con ganas de conocer el Inaem, tomará rápidamente el pulso a la Orquesta Nacional –sin director tras la salida de Josep Pons– «debido a la importancia de la institución».

 Prieto y la colección Carmen Thyssen
Procede del mundo de la enseñanza este Doctor en Derecho por la UNED y catedrático de Derecho Administrativo, nacido en Valladolid en 1949. Posee una amplia trayectoria de colaboración con organismos internacionales. A su cargo tendrá la gestión de Bellas Artes, así como bienes culturales y archivo y bibliotecas tras la refundición de las direcciones generales y deberá negociar el futuro de la colección de Carmen Thyssen en España.