Historia

Rusia

Todo va bien tovarich

Ya digo que el franquismo es el problema número uno al que nos enfrentamos, que todo lo demás tiene arreglo 

La Razón
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No sé ustedes, pero yo desde que soy progre lo tengo clarísimo: la culpa de la situación, que en realidad no es grave para nada, la tiene el capitalismo, la banca, el gran capital y los contratos de eme mayúscula seguida de puntos suspensivos de la época de Aznar, que hicieron que gentes que habían logrado llevar una vida honorable sin trabajar jamás incluso echaran unos jornales por entonces. Claro que aquel tiempo ya pasó, por fortuna, porque no hay que olvidar que el PP nos metió en una guerra ilegal y nos merecemos un Gobierno que no nos mienta, por eso ahora con ZP tenemos lo que nos merecemos. No hablemos de la especulación inmobiliaria aznarista, que nos ha puesto las deudas de corbata a toda la ciudadanía «subprime». Yo creo, como Dzherzhinski y la mayoría de la ciudadanía de progreso del Estado español, que todo está permitido cuando se levantan las espadas, no en nombre de la opresión, sino para abrir paso a la libertad universal, y que por eso hay que confiarle todo el poder a los Soviets, y que estar todo el día quejándose de que el Estado español va por muy mal camino es cosa de fachas. A mí me parece que el franquismo es ahora mismo la principal preocupación de la ciudadanía porque, vamos a ver, es que Franco está por todas partes, e incluso tiene una nieta que, aunque parece progre, no deja de contribuir a la maligna rueda del capitalismo cobrando exclusivas que interesan muchísimo a la ciudadanía porque ya digo que el franquismo es el problema número uno al que nos enfrentamos, que todo lo demás tiene arreglo, pero que Franco se nos fue de rositas, sin ser juzgado ni ejecutado –no necesariamente por ese orden– y que eso es muy fuerte. Yo creo que, como decía Lenin, hace falta dar el asalto al cielo y –aunque ahora mismo estoy más ocupada que la decoradora de Bono porque tengo muchas manifas en la agenda– estoy dispuesta a pegarlo y buscar a Franco si es que está ahí (creo que llevaba muchas recomendaciones santurronas, pero cualquiera sabe si no anda por el infierno, que es donde le correspondería estar siempre que la Conferencia Episcopal no haya tirado de sus influencias). Digo yo lo mismo que decía Kerenski, aquello de que sin Rasputin Rusia no hubiera tenido un Lenin, pues sin Aznar no hubiésemos padecido a Franco, por lo que habría que explorar la vía legal y pedirle responsabilidades al joven melenudo de las Faes; a él y a Rajoy, que también tapa mucho, sobre todo con el «Gürtel»; y con la barba: que no hay manera de que dé la cara. Hay un chiste subversivo que dice: «¿Sabes que Adán y Eva eran españoles? ¿Por qué? Porque estaban desnudos y en el paro y aun así les decían que se encontraban en el paraíso». Pues bien, el facha que se lo ha inventado me da la impresión de que, además, es un capullo.