Comunidad de Madrid
«Rajoy no va a dejar que se ponga en riesgo el Estado de Bienestar»
«El PP tiene el compromiso de garantizar los cuatro pilares básicos: Sanidad, Educación, pensiones y el seguro de desempleo»
Dos veces presidente de la Comunidad de Madrid y tres veces alcalde de la capital, Alberto Ruiz-Gallardón habló ayer en el segundo ciclo de desayunos de Las Razones del Cambio. Uno de los políticos que aparece en todas las quinielas de ministrables de la campaña preelectoral valoró las medidas de austeridad sin recortar el Estado del Bienestar que el Partido Popular aplicará para salir de la crisis económica.
–¿Con qué herramientas cuenta el Partido Popular para resolver la crisis?
–No hay mayor política social que la generación de empleo. Ése es el objetivo prioritario del PP. Lo que es impensable es creer que si no somos capaces de dinamizar la economía y si no somos capaces de generar empleo, vamos a ser capaces de mantener o incrementar las prestaciones sociales de nuestro Estado Social.
ECONOMÍA
«La crisis la tenemos que resolver entre todos, no sólo los ricos, los que fuman y los que beben»
–¿Ve margen para que cuando el PP llegue al Gobierno descongeles las pensiones?
–Hay margen, cuando la economía crezca. Tenemos que ser conscientes de que la mayor y mejor aportación que podemos hacer a nuestro Estado Social es la generación de empleo. A través de ella, generaremos los recursos suficientes para financiar las políticas sociales. Lo que es impensable es creer que si no somos capaces de dinamizar la economía y si no somos capaces de generar empleo, vamos a ser capaces de mantener o incrementar las prestaciones sociales de nuestro Estado Social y democrático de derecho. Nuestro objetivo tiene que ser claro y rotundo: tenemos que ir necesariamente a una recuperación económica que pasa por un primer factor: el resultado de las elecciones el próximo 20-N.
–¿Y cómo van a lograr recuperar la confianza de los mercados?
–Hasta que España no recupere la confianza, primero en sí misma, y después que confíen en nosotros el resto de países de la UE y los mercados, no tendremos posiblidades de iniciar la recuperación económica. El hecho de que haya elecciones, que haya un Gobierno nuevo, comprometido con un programa, con un criterio no sujeto a vaivenes, ni a cambios, ni a contradicciones... esto será en sí mismo un factor de confianza. Después tendrán que venir las reformas que anunciará nuestro candidato a la presidencia en el programa electoral.
–Para crecer hay que corregir el déficit. Hay muchas críticas al hecho de que las administraciones públicas –también las gobernadas por el PP– no pagan. ¿Qué solución tiene para eso?
–Las administraciones tienen que hacer todos los esfuerzos que estén en su mano para atender todas las demandas que se les planteen, y para atender los pagos de todas las contrataciones que hayan realizado. Ahí es donde el Gobierno del PSOE, por motivos exclusivamente electorales, ha tenido una actitud discriminatoria hacia los ayuntamientos, y ha sido permisivo consigo y con las autonomías. Si el Ejecutivo de Zapatero se hubiese aplicado a sí mismo la misma restricción en cuanto a refinanciación de deuda que nos ha aplicado a nosotros, no hubiera podido pagar su sueldo ni el de ningún funcionario del Estado, porque no hubiese tenido dinero para pagar la nómina desde el 7 de enero. Ésa es la realidad económica.
–¿Cree acertada la política de gravar las grandes fortunas, el alcohol y el tabaco que abandera el candidato socialista, Alfredo Pérez Rubalcaba?
–La solución a la crisis la tenemos que resolver entre todos y la presión fiscal tendrá que ser adecuada a la capacidad de cada contribuyente y a la eficiencia del propio sistema para que la sociedad tenga el nervio y el impulso necesario para la generación de empleo. Si Rubalcaba sigue diciendo que tiene fórmulas mágicas con tres o cuatro colectivos de sociedad española que nos van a resolver la crisis a todos los demás, no está diciendo la verdad.
–¿Se ve dentro del Gobierno o en las listas de Mariano Rajoy?
–En relación a mi presencia en el Gobierno de Rajoy, me siento halagado, pero si hay algo claro y evidente es que la única persona que va a conformar el próximo Gobierno de España es el presidente del PP, Mariano Rajoy. Hablo a diario de multitud de aspectos políticos con él y no me ha dicho absolutamente nada que no sea lo que en estos momentos estoy haciendo, que es trabajar por un proyecto nacional desde la dirección nacional del partido, y realizar mi gestión como alcalde de Madrid. Ésa es la realidad y, además, es como debe ser.
FUTURO
«Mi ambición política está en conseguir el Gobierno que necesita España»
–Si finalmente es candidato al Congreso, ¿cree que se repetirá el debate que hubo en los pasados comicios cuando pidió expresamente ser diputado?
–Hace cuatro años pedí públicamente ir en las listas del partido y fue un error, porque hay una serie de peticiones que no deben hacerse con carácter público. Las relaciones con la Comunidad de Madrid son ahora muy buenas, mejores que hace cuatro años, dado que hemos resuelto algunas diferencias que derivaron en conflictos. A veces es inevitable que se produzcan entre dos administraciones que operan en un territorio tan intenso, pero la inmensa mayoría de esos aspectos sectoriales y muy concretos están hoy resueltos gracias al diálogo y al trabajo de todos.
–¿Le gustaría ocupar un papel central en la política española?
–Tengo ambición política por mi país, que está claramente determinada en conseguir que Mariano Rajoy forme el Gobierno que necesita España. Eso que algunos hemos defendido siempre, y que ahora estamos muy contentos de no estar solos en esa defensa, sino de que sean muchos más los que lo defienden, porque eso significa que Rajoy ha sabido convencerlos a ellos, como lo hizo con nosotros desde el principio. Pase lo que pase, el sucesor de Mariano Rajoy, cuando llegue ese día, será una persona que estará probablemente más cerca de los treinta años que de los cuarenta.
EDUCACIÓN
«Pedir un esfuerzo adicional a los profesores es un camino adecuado»
–¿Está de acuerdo con las medidas que en materia de Educación se están llevando a cabo en la Comunidad de Madrid con el fin de generar un ahorro?
–En un momento de dificultades, donde los recursos son escasos y las demandas son muchas, lo que ha hecho la Comunidad de Madrid no ha sido rebajar la calidad educativa, ni rebajar el derecho a la educación; lo que ha hecho es pedir un mayor esfuerzo a aquellas personas que con profesionalidad, vocación y admiración por parte de los ciudadanos se dedican a la docencia. Me parece que es una política adecuada.
–¿Cómo va a abordar los presupuestos municipales de 2012?
–El Ayuntamiento de Madrid lo abordará desde una situación de incertidumbre, como todas las administraciones locales y autonómicas debido a que el Gobierno ha incumplido su deber de presentar un proyecto de ley de presupuestos, al margen de disolver la legislatura. Y desde esta incertidumbre, presentaremos unos presupuestos ajustados a una realidad que ya venimos dos años adecuando a la situación económica que vive nuestro país.
–¿Realizará ajustes como los llevados a cabo por las autonomías?
–Podemos aplazar inversiones, como ha ocurrido con alguna, por ejemplo la del Centro Internacional de Convenciones, previsto junto a las torres de la Castellana, pero garantizamos los servicios sociales y la atención a los sectores más débiles en la sociedad. Es la diferencia entre los recortes sociales efectivos que practica el Gobierno del PSOE y el compromiso de mantenimiento y que garantiza el PP.
–¿Intentará buscar liquidez subiendo impuestos?
–No vamos a subir los impuestos porque no se le puede pedir a un ciudadano, en tiempos de crisis, que merme su capacidad de gasto y de inversión para dinamizar la propia economía. Con la crisis que tenemos, lo que debe producirse es una congelación de la presión fiscal, y eso es lo que vamos a hacer en el Ayuntamiento.
–¿Ha valorado el impacto que tendrá en las arcas de la capital el coste de refinanciar su deuda, tal y como está la prima de riesgo española?
–Somos el tercer territorio de España que más riqueza aportamos. Como muchas veces se ha dicho en los debates del Congreso de los Diputados, la ratio que de verdad importa es la ratio deuda/PIB, que es la que aplica la UE. Y en esa ratio, Madrid está en una situación extraordinariamente favorable porque nosotros nos endeudamos cuando podíamos y debíamos hacerlo, en un momento en que la situación financiera lo permitía.
DEUDA
«El 100% de las inversiones han tenido un retorno para los madrileños»
–Sin embargo, se le ha criticado por gastar tanto dinero.
– Pero el Ayuntamiento de Madrid se endeudó para invertir, no para aumentar el gasto corriente ni la plantilla de funcionarios. Todas las inversiones que se han financiado con la deuda, han tenido un retorno para la sociedad y nuestra economía. Si aquí se han instalado más empresas es consecuencia de que hemos modernizado la ciudad. Y si no hubiésemos hecho las inversiones en grandes infraestructuras del transporte, tanto de transporte público como en toda la remodelación de la M-30 y de la red viaria, no seríamos un territorio competitivo, adecuado a la inversión privada, y no se hubiese producido la generación de empleo por encima de la media española.
SOBRE EL 15-M
«El sistema sí vale, el Gobierno no»
–Si el PP llega al Gobierno, ¿teme que los indignados sean un movimiento permanente?
–Nuestra democracia es el mayor logro que hemos alcanzado y tenemos que estar orgullosos de ello. Soy partidario de decir que aquellos ciudadanos a los que he elegido con mi voto en las urnas, sí nos representan, y lo hacen porque es la base de la democracia. Tenemos que devolver el prestigio a las instituciones. Lo que no vale en política es que cuando gobierna la derecha y lo hace mal, la solución esté en cambiar el Gobierno por uno de izquierdas; pero si es al contrario, y la izquierda ha fracasado, no nos guste que venga un gobierno de centro-derecha y la solución sea cambiar el sistema. En el fondo es lo que late de esa propuesta. El sistema sí vale. Lo que ha fracasado no es el sistema, sino el Gobierno.
ETA
«El único camino que se ha mostrado eficaz es el camino de la firmeza»
–¿Estamos ante el fin de ETA o se trata de una nueva trampa?
–La sociedad española no le debe nada a los terroristas. Ni cuando mataban ni cuando han dejado de hacerlo. Es la banda terrorista la que está en deuda con España.
–¿Cree que el PSOE busca un rédito electoral para el 20–N de su política antiterrorista?
–Las instituciones democráticas no pueden rebajar su legitimidad aceptando en su seno a aquellos que intentan destruirlas. Se equivocan quienes se precipitan en dar por concluida la lucha contra el terrorismo. El único camino que se ha mostrado eficaz es el de la firmeza y en ese camino tenemos que seguir.
–¿Qué opina de gestos como el que hizo Patxi López o el acercamiento de presos?
–La Justicia tiene que ser justa y el principio de equidad básico es dar a cada uno lo que corresponde. Si no se le da, el reproche que corresponde al terrorista que ha matado, que ha extorsionado, que ha lesionado, con quien se está siendo injusto es con la víctima en particular y con la sociedad en general. Ahí es donde se produce la injusticia.
JUSTICIA
«Es un desprecio a la Constitución decir que un tribunal no puede desautorizar una ley aprobada en referéndum»
–¿La Justicia es o no independiente?
–No basta con un sistema que garantice un acceso independiente a la carrera judicial sino que hace falta garantizar la independencia durante el ejercicio de las funciones judiciales tanto a la hora de juzgar como a la hora de hacer ejecutar lo juzgado. De hecho, una de las declaraciones que más me ha escandalizado de los últimos tiempos, es la que hizo el candidato del partido socialista, el señor Rubalcaba cuando dijo que un tribunal no puede desautorizar una ley que ha sido aprobada en referéndum.
–Eso es un desprecio absoluto a la Constitución Española porque es tanto como decir que aquella ley que ha sido aprobada por todos los españoles puede ser modificada por una parte de ellos. Creo que la solución que tendría que aplicarse es radicalmente la contraria a la que propone Rubalcaba, es decir, que no pueda someterse a referéndum una ley que previamente no haya sido declarada constitucional por el Tribunal Constitucional. Ese mecanismo lo tuvimos en España con el recurso previo de incostitucionalidad y esa garantía la derogó el partido socialista.
–¿Y el proyecto de ley para que el Ministerio Fiscal instruya un sumario directamente?
–Ahora que se abre el debate sobre si el fiscal puede o no instruir un sumario tengo que decir que un sumario solamente puede ser instruido por una persona que sea absolutamente independiente del poder político. Si no existe esa independencia en el fiscal no podrá instruir el sumario.
–¿Cómo afrontaría la renovación del Tribunal Constitucional?
–La elección de sus miembros debería de llevarnos a una recuperación en el Consejo General del Poder Judicial de una participación de los propios jueces, un mecanismo de garantía que, una vez más, derogó el partido socialista. Con relación al Tribunal Constitucional deberíamos establecer mecanismos que garantizaran su total independencia para que al margen de cual fuese el sistema de acceso a esa alta magistratura, el magistrado del Tribunal Constitucional se supiese independiente mientras esté en el ejercicio del cargo y durante el resto de su vida. Esto está establecido en otros países y deberíamos trabajar en esa dirección, ese es mi criterio.
CULTURA
«Hay que huir de cualquier intento de instrumentalizar la cultura»
–Actualmente numerosos ayuntamientos españoles están recortando en materia cultural. ¿Cree que esto supone que buena parte de la cultura depende del dinero público?
–Es verdad que la cultura depende en muy buena medida del dinero público. Hay que huir de cualquier intento de instrumentalizar la cultura o de hacerla dirigir en un sentido o en otro de los debates ideológicos que tiene una sociedad plural abierta y democrática como es la nuestra. El papel que tenemos que tener las administraciones públicas en relación con la cultura es crear el tiempo y el espacio. Eso significa hacer contenedores culturales, no definir los contenidos.
–¿Está a favor de las listas abiertas como opción para cambiar el modelo electoral español?
–Si pensamos que abriendo las listas se va a producir una variación sustancial creo que podemos provocar una desilusión. Porque hay que recordar a los españoles que ya tienen listas abiertas en el Senado y es un mecanismo que no parece que estén utilizando elección tras elección.
–¿Cuál sería su ley electoral ideal?
–En el terreno intelectual, dejo muy claro que no es una propuesta política, lo que me gustaría es que no hubiera listas. Creo que si queremos de verdad acercar a los representantes con los representados la mejor forma no es abrir las listas sino que con circunscripciones únicas no haya listas y los ciudadanos elijan quién de las distintas opciones quieren que sea su representante.
–¿Cómo ve el papel de las Fuerzas Armadas en un momento de importantes recortes presupuestarios y con su labor de proyección internacional?
–Tenemos que ser conscientes de que estamos hablando de uno de los elementos de cohesión nacional más importantes que tenemos. Asumiendo los recortes que sean necesarios en una época de crisis, hay que tener en cuenta también que una parte muy importante de la I+D+i que se produce en España, se desarrolla en programas vinculados directamente con las Fuerzas Armadas. Por lo tanto, los ejércitos deben situarse en la vanguardia tecnológica y deben tener el apoyo de la sociedad.
–¿Cuáles cree que deben ser los pasos que debe adoptar la Unión Europea respecto a Grecia?
–En tiempos de bonanza podíamos compartir la moneda teniendo sin embargo legislaciones radicalmente distintas cuando no contrapuestas entre los distintos estados miembros en relación con la política fiscal. Hoy hemos visto que quiebra y que la crisis de uno nos afecta directamente a todos. El camino no puede ser de ninguna forma dar un paso atrás en la historia, ni nosotros ni los que están en dificultades más graves que nosotros, por lo tanto yo soy absolutamente partidario de hacer todo lo que sea necesario para evitar que Grecia quede descolgado de este proyecto.
–¿Cree entonces que habría que ir a una mayor integración de la Unión Europea o, por contra, frenar esto y que cada país tome más decisiones autónomas?
–Mi respuesta es sin duda ninguna la integración. Y no me preocupa que eso reduzca los márgenes de maniobra del futuro gobierno de España o de cualquier país miembro de la Unión Europea. Creo que hay una coincidencia intelectual entre las propuestas que el gobierno de Mariano Rajoy va a llevar a cabo con lo que Europa necesita en esa armonización de políticas fiscales.
EUROPA
«Las propuestas de Rajoy favorecen la armonización de políticas fiscales»
–En caso de que exista una Europa de dos velocidades ¿estaría España en el primer nivel o se podría quedar descolgada
–Una de las cosas de las que tenemos que estar más orgullosos los españoles es de haber dado los grandes pasos para estar donde estamos en estos momentos en Europa. Por supuesto uno es entrar en la Unión Europea, otro es la OTAN, elemento determinante de nuestra posición estratégica en el futuro y el último en conseguir que desde el primer momento nosotros estuviésemos en la moneda única. Creo que esos pasos son hitos históricos y que son absolutamente y deben ser irreversibles y cualquier gobierno español tiene que tener muy claro que mantener esos logros alcanzados no puede estar sujeto a ningún tipo de coyuntura ni a ningún tipo de discusión. Y en segundo lugar ser consciente de que el camino va hacia la integración y que o armonizamos nuestras políticas fiscales o impedimos que políticas en cada uno de los estados miembros rompan la acción conjunta y fuerte de la unión. Si no no tendremos ninguna capacidad competir con Asia y con Norteamérica.
DUPLICIDADES
«para la misma tarea hay oficina del estado, regional y municipal»
–¿Hay que racionalizar las administraciones públicas?
–Evidentemente, nosotros no podemos seguir teniendo el peso administrativo para realizar las funciones que tienen que realizar las administraciones públicas. Y podemos reducir ese peso administrativo evitando las duplicidades que en estos momentos solapan actuaciones de las tres administraciones públicas. Lo prioritario es que no existan tres oficinas administrativas, una del Estado, otra de la Comunidad Autónoma y otra del Ayuntamiento, para realizar una tarea que solamente uno de ellos tiene que realizar. E incluso podríamos llegar a supuestos en los que la misma oficina administrativa, independientemente de la administración a la que esté adscrita, pueda realizar competencias del Estado, de la Comunidad y del Ayuntamiento, según los distintos títulos competenciales que cada una de ellas tenga.
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