Barcelona

UGT advierte de que la reforma agravará la precariedad laboral de las inmigrantes

UGT de Cataluña ha alertado de la doble discriminación que padecen las mujeres inmigrantes, que ganan la mitad que los hombres autóctonos y sufren un 10% más de paro que las catalanas, y han advertido de que la reforma laboral impulsada por el Gobierno agravará su precariedad laboral en los próximos meses.

En la presentación en Barcelona del informe 'Mujer inmigrada y mercado laboral. La precariedad, el primer paso hacia la explotación laboral', la secretaria de Igualdad y Políticas sociales de la UGT de Cataluña, Raquel Gil, ha explicado que la peor situación laboral de las mujeres inmigrantes está vinculada a la mayor temporalidad, paro, trabajo en sectores muy feminizados con peores condiciones y salarios, así como la subocupación por la dificultad para homologar las titulaciones de los países de origen.

En un contexto en el que los contratos a extranjeros han caído un 6,9%, pasando de los 43.821 en enero de 2009 a los 36.840 en enero de 2010, en abril del mismo año se formalizaron 14.533 contratos temporales a mujeres inmigrantes, frente a tan sólo 2.420 contratos indefinidos, lo que la organización apunta como un síntoma de precariedad laboral.

Asimismo, la tasa de paro entre inmigrantes no comunitarias supera en más de diez puntos a las de las catalanas, con valores del 28% y el 15%, respectivamente, en el primer trimestre del 2010, según la encuesta de población activa del Instituto Nacional de Estadística (INE). Un dato "especialmente preocupante"para Gil, quien ha recordado que en muchos casos son las mujeres inmigrantes quienes sostienen la economía familiar.

La subocupación es otra lacra para las inmigrantes según la organización, que ha destacado que el 22% de las extranjeras han cursado una educación superior frente al 39% de las españolas, aunque dicho porcentaje decrece en el caso de las mujeres latinoamericanas (18,8%) y del resto de países (13,8%).

El 36% de las mujeres activas españolas ocupan lugares de trabajo altamente cualificados, frente al 17% de las extranjeras comunitarias y al 12% de las no comunitarias. Al mismo tiempo, el 13% de las mujeres activas españolas ocupan lugares muy poco cualificados, frente al 46% de las latinoamericanas y al 50% de las europeas no comunitarias, que en el 75% de los casos tienen una formación secundaria superior o universitaria.

La tasa de actividad -personas que tienen trabajo más la que están dispuestas a trabajar- es del 64% en inmigrantes no comunitarias frente al 53% en las catalanas, lo que UGT subraya en contra del idea "estereotipada"de que la mayoría de extranjeras vienen por reagrupación y limitan su actividad al ámbito privado.

En cuanto al tipo de ocupación, la organización ha alertado de la precariedad en sectores altamente feminizados como el servicio doméstico y el de la atención a personas en situación de dependencia, con peores horarios y salarios que la media.

Por todo ello, la portavoz de AMIC-UGT de Cataluña, Janette Vallejo, ha reclamado que no se limiten a sectores feminizados los permisos de trabajo para mujeres reagrupadas, y que la formación ocupaciones se equipare a una alta a la Seguridad Social a la hora de renovar las autorizaciones de residencia.

Asimismo, ha pedido que se facilite la homologación de las titulaciones obtenidas en el extranjero, y que se implemente de forma eficaz la inspección de trabajo traspasada este febrero a la Generalitat para combatir la economía sumergida y la explotación laboral.

"La reforma laboral supone un retroceso en los derechos adquiridos", ha apostillado Gil, quien ha expresado su temor de que en los próximos meses la precariedad de las mujeres inmigrantes se agrave y se extienda a las catalanas.