Murcia

La Comunidad debe adaptar sus modelos productivos a las nuevas tecnologías

El estudio de Cesrm y AFI pide una mayor cualificación de los trabajadores murcianos. 

La Comunidad debe adaptar sus modelos productivos a las nuevas tecnologías
La Comunidad debe adaptar sus modelos productivos a las nuevas tecnologíaslarazon

La ciudadanía murciana debe dar más valor a la formación y, sobre todo, debe dar la espalda a la economía sumergida y sancionar socialmente a quienes la practican». Estas son las principales conclusiones del estudio «¿Hacia otra estructura productiva para la economía de la Región de Murcia?», promovido por Consejo Económico y Social de la Región de Murcia (Cesrm), que ha sido elaborado por Analistas Financieros Internacionales-Consultores de las Administraciones Públicas (AFI-CAP).

José Antonio Herce, socio-director de AFI-CAP, junto al presidente del Cesrm, Antonio Reverte, presentaron ayer el informe en el que se destaca que la Comunidad Autónoma «ha protagonizado un rápido avance económico y social». Sin embargo, dicho estudio también resalta que «este crecimiento no ha estado equilibrado habiendo producido disfunciones que la severa crisis económica reciente ha multiplicado y agravado». Por lo tanto, las disfunciones de crecimiento y las consecuencias de la crisis se aúnan en este trabajo para «determinar la necesidad de que la Región transite hacia una nueva estructura productiva caracterizada por la renovación de los grandes sectores murcianos y el impulso de los sectores de futuro».

Herce afirmó que la Región no tiene que cambiar su estructura productiva, sino que debe seguir apostando por los modelos productivos tradicionales que siempre han producido riqueza, pero adaptándolos a las nuevas necesidades del mercado y apostando por las nuevas tecnologías. «Estamos propugnando que la agroalimentaria, el ciclo del agua, el turismo, la construcción y el sector del hábitat, la energía, la química, el transporte y la logística, y los servicios empresariales se vean apoyados por esos desarrollos punteros tecnológicos que normalmente constituirían un sector en sí mismo en economías más avanzadas».

El director de AFI también se refirió a la falta de cualificación que actualmente existe en la población murciana en edad de trabajar, y es que según el estudio, en la época de bonanza económica era tan fácil conseguir un trabajo poco cualificado que muchos jóvenes abandonaron los estudios. Ahora en plena crisis económica, estos jóvenes no encuentran trabajo y lo tendrán aún más difícil en el futuro si el modelo productivo se encamina a la incrementación de nuevas tecnologías. «Si no apostamos por la educación tendremos problemas dentro de unos años a la hora de sustentar esta elevación tecnológica que estamos reclamando para los grandes sectores productivos económicos de la Región. Por lo tanto, todos los esfuerzos en el corto plazo deben dirigirse hacia la mejor cualificación de los trabajadores hacia la enseñanza en todos sus niveles, en el sentido más radical que nos podamos imaginar», añadió Herce.

En este sentido, apostilló que «tenemos que poner la cualificación de los trabajadores en el centro de las preocupaciones de todos los agentes económicos».

En cuanto al turismo, los responsables de este estudio consideran que el proyecto de Marina Cope debe ser reformulado, porque es un propósito con futuro, a pesar de que actualmente cuente con muchos detractores.

 

 


Asimismo, el dossier pone de relieve que «no se concibe el éxito sin la implicación de todos los agentes relevantes de la socio-economía murciana». Como bien manifiesta el informe, «se trata de hacer las cosas mejor, de ir escalando peldaños en la senda de la productividad, la formación de la población y la innovación empresarial e institucional».

En cuanto a los principales sectores motores de la economía en la Comunidad, cabe hacer hincapié en el agroalimentario, el mayor legado productivo. En el estudio se detalla que «no puede descuidarse» y que Murcia debe destacar por la calidad, así como por «la transformación de las producciones primarias».

Mientras que cita al sector de la construcción como uno de los principales motores de la economía murciana, pero asevera que se «debe actuar dentro de un equilibrio, con una nueva mentalidad empresarial» y que «hay que crear empresas locales de más dimensión y las UTE (Unión Temporal de Empresas) no resuelve el problema».

Por otro lado, el informe subraya que «el turismo tiene todavía mucho que aportar a Murcia.