Atenas

El mercado castiga al euro y el Ibex sufre la mayor caída desde Lehman

Las medidas de ajuste del Gobierno no logran calmar a los mercados y la Bolsa registró ayer un descenso del 6,64%. Consulte todos los valores de la Bolsa

El Ibex cae cerca de un seis por ciento
El Ibex cae cerca de un seis por cientolarazon

MADRID- La espectacular subida del lunes fue un espejismo alcista en mitad de la tormenta bursátil más intensa de los últimos dos años. El mercado reclamaba medidas de ajuste y los gobiernos las anunciaron, pero la presión del parqué ha renovado su intensidad con un nuevo fantasma en el horizonte: la posible fragmentación de la Unión Europea (UE), que se ha traducido en importantes descensos para la divisa comunitaria y, por extensión, a los principales índices de la eurozona.El euro perdió ayer un 1,15% frente al dólar al cierre de la sesión en el Viejo Continente y marcó mínimo intradía en 1,237 «billetes verdes», aunque luego se estabilizó por encima de 1,24 dólares con la referencia solitaria de Wall Street. El castigo sobre la divisa comunitaria, que ya está en niveles de hace cuatro años, ha ganado intensidad en las últimas sesiones como fiel reflejo de los problemas que atraviesan las economías periféricas de la eurozona, que amenazan la estabilidad presupuestaria y la unidad de los países miembros de la UE.El parqué se muestra muy sensible a los rumores y, en comparación, su reacción a los mismos es más intensa que la que muestra ante las medidas anticrisis de los gobiernos. Además, el mercado cotiza la posibilidad de que los ajustes presupuestarios anunciados no serán suficientes, especialmente en casos como España o Portugal.La salida de los inversores extranjeros de la renta variable española vuelve a obedecer al grito de «¡vende España!» y las carteras deshacen sus posiciones en el parqué nacional ante las dudas de la solvencia del país en el corto y medio plazo. Ni planes de rescate ni recortes de gastos públicos, la Bolsa no encuentra suelo que frene sus descensos con volatilidad exagerada.El Ibex 35 sufrió ayer un recorte del 6,64%, la mayor caída desde la quiebra de Lehman Brothers, lastrado por sus valores más endeudados y con todos sus miembros en negativo. El recorte llegó a superar el 7%, pero algunos movimientos compradores en una nueva subasta de cierre de infarto mitigaron el castigo para la renta variable española.Abengoa se llevó la peor parte con un descenso del 9,53%, pero el desplome de ayer vino motivado por el castigo de los inversores al sector financiero, especialmente a los tres grandes bancos,los principales tenedores de deuda soberana y corporativa. Así, Santander se dejó un 8,98%, Popular un 8,6% y BBVA un 7,58%.Los tres principales bancos españoles arrastraron al resto de entidades cotizadas en el mercado y los recortes oscilaron entre el 4,24% del Sabadell y el 6,46% de Bankinter, en cualquier caso por debajo del selectivo. Entre los grandes valores, Telefónica cedió un 5,53%, Repsol un 6,11% e Iberdrola un 6,69%. El volumen de negocio rozó los 6.000 millones de euros con mucho movimiento en el mercado de bloques.El resto de mercados europeos también sufrieron importantes recortes, pero en ningún caso de la misma magnitud que el Ibex. El Dax germano perdió un 3,12%, el Cac parisino se dejó un 4,59% y el «footsie» londinense sufrió una caída del 3,14%. Entre las economías periféricas, Atenas recortó un 3,41% y Lisboa un 3,97%.

El oro, valor refugioLa onza de oro alcanzó ayer su máximo histórico en 1.249,4 dólares y se ha convertido en el «valor refugio» de los inversores ante la volatilidad que registran los mercados de valores. El metal no está tan expuesto a los especuladores y parece una opción atractiva para escapar de la vorágine bajista de las Bolsas. El crudo volvió a caer ayer y el barril de Brent se situó en 77,3 dólares en el mercado de futuros.Los ministros de Economía del G7 (Alemania, Canadá, EE UU, Francia, Italia, Japón y el Reino Unido) mantuvieron ayer una teleconferencia para evaluar los últimos acontecimientos que han sucedido en los mercados financieros internacionales.Se trata de la segunda conferencia telefónica que sostienen los ministros del G-7 en una semana, en un contexto de turbulencias en los mercados que amenazan con frenar la recuperación global de la crisis, según informa Efe.