Los cazadores también votan por Antonio PÉREZ HENARES

Otras cosas hay quien las discute, pero la importancia económica de la caza no la cuestiona nadie. En algunas regiones, como Castilla-La Mancha, es un factor esencial para su PIB (600 millones de euros). En el conjunto de España su aporte supera los 3.000 millones. En los programas electorales, sin embargo, es difícil hallar una referencia. El PP es el único que ha hecho algún apunte. Una mención en el aspecto del turismo y unas líneas específicas donde señala su disposición a apoyarla como parte de ese sector primario junto a agricultura, ganadería y pesca. Bienvenido sea el apunte, aunque no pase de allí. Porque en los otros partidos ni una palabra. Nada en el del PSOE y en el de IU aún menos. Los verdes, claro, se mueven entre no dejarla respirar o asfixiarla. El próximo gobierno haría bien en prestarle más atención que el saliente. Con algunos mínimos pero prioritarios ejes de actuación. Entenderla como lo que es, riqueza y conservación. Meterla en el previsto Ministerio de Agricultura. Poner al frente del correspondiente departamento a gentes que conozcan el sector y que no sean sus más acreditados enemigos. Porque ésa ha sido en algunos casos la tónica: que actuaran y legislaran sus más acérrimos detractores. Armonizar la disparatada y dispersa legislación y terminar con el espectáculo de las 17 licencias. Comprenderla también como factor regulador y de control de las poblaciones en algunos casos disparadas y dañinas para todo el ecosistema. Y no es cosa menor, estudiar las formas de prever y deslindar responsabilidades en el creciente asunto de los accidentes provocados por especies cinegéticas. De ello puede hablar el presidente gallego cuyo coche chocó con dos jabalíes en Verín. Vamos que tajo va a tener ese departamento. Pero que será bien recibido por los cazadores, un millón de personas, es algo que también debían contar. Al menos porque, además de cazar, también votan ¿saben?