San Sebastián

«Foxfire» en la mejor tradición de Cantet por Carlos Pumares

La Razón
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Un buen día en San Sebastián porque las dos películas a concurso lo son. La de Trueba es hermosa. Da una vuelta al tema de Pigmalión, pero a la inversa, es decir que el artista se enamora de la modelo, planteamiento con el que acierta de pleno el cineasta, que se apoya en un magnífico Jean Rochefort, cuya presencia impone, lo mismo que Claudia Cardinale, llena de magia, que pasa sin hacer ruido. Por poner un pero, quizá le sobren un par de planos finales, pero es una belleza. Damos también la bienvenida al nuevo trabajo de Laurent Cantet (un director que deslumbró en sus principios y que tiene en su poder los máximos galardones de Venecia y Cannes), «Foxfire», que arremete contra la sociedad neoyorquina de 1953 en la que un grupo de chicos estudiantes, hartos de humillaciones, deciden formar una sociedad secreta para vivir con arreglo a sus propias leyes. La lástima es que lo que en un principio se nos presenta como luminoso va oscureciéndose poco a poco y cierra un final en falso que nos parece un tanto irreal. No obstante, la cinta genera debate lo que es interesante en un trabajo tan estimable como éste, en la mejor tradición del director.