Andalucía

La Junta se contraprograma en Coria y los partidos se enzarzan con reproches

El PP se queja de no haber sido informado sobre los actos

Javier Arenas y Antonio Sanz participaron en un acto del PP en Carmona
Javier Arenas y Antonio Sanz participaron en un acto del PP en Carmonalarazon

Sevilla- Ni siquiera la celebración del 30 aniversario del referéndum del Estatuto se libró ayer del rifirrafe político. Hubo más caos que orden. En el Parlamento, la presidenta de la Cámara, Fuensanta Coves, y tres de los siete ponentes del texto de 1981, José Rodríguez de la Borbolla, Javier Pérez Royo y Carlos Rosado. Ni el jefe del Ejecutivo andaluz, José Antonio Griñán, ni ningún miembro del Consejo de Gobierno. Sí hubo integrantes de la Mesa de la Cámara y diputados de todos los partidos, entre ellos el presidente del PP-A, Javier Arenas. Hasta el municipio sevillano de Coria del Río se fue Griñán, acompañado por Coves, la consejera de Presidencia, Mar Moreno, la hija de Blas Infante María de los Ángeles Infante y agentes sociales como el secretario general de CC OO-A, Francisco Carbonero. Por su parte, el PP celebró un acto con jóvenes en Carmona –donde se redactó el borrador del Estatuto de 1981– para conmemorar la efeméride, al que asistieron numerosos cargos de esta formación, entre ellos Javier Arenas, y su «número dos» Antonio Sanz.
 En Carmona, Arenas criticó que la Junta y el Parlamento no hayan consultado con su formación la celebración de los actos. «Los 30 años de gobiernos del PSOE en Andalucía no respetan ni a la oposición, ni al Parlamento ni al Estatuto». Asimismo, se comprometió a que si se convierte en el próximo presidente de la Junta «jamás se hará un acto institucional o vinculado al Estatuto sin haberlo hablado, de la A a la Z, con todos los partidos». «El Estatuto no es patrimonio de nadie, sino de todos», deslizó, al tiempo que censuró que 30 años después el actual Gobierno andaluz ha convertido los derechos que se recogían en esta norma estatutaria en «derechos de papel», citando entre ellos el derecho al trabajo, a la vivienda digna o a la educación de calidad.
Desde el PSOE contraatacó el portavoz del Grupo Parlamentario, Mario Jiménez: «Se siguen repitiendo algunas cuestiones con las que comprobamos que todo ha cambiado en Andalucía salvo la derecha». Por su parte, Griñán, defendió que «ni una crisis ni mil crisis pueden terminar con la conquista autonómica».