España

La crisis reduce la contaminación

Un 79 por ciento de la población española respiró aire contaminado por encima de los índices recomendados por la OMS en 2009, frente al 84 por ciento de 2008, un descenso debido a la caída de la actividad industrial y del tráfico que ha ocasionado la crisis económica.

Un informe presentado hoy en rueda de prensa por Ecologistas en Acción, basado en datos del Ministerio de Medio Ambiente y de las comunidades autónomas, atribuye a la inestabilidad meteorológica la mejora de la calidad atmosférica (mayor circulación del aire y dispersión de los contaminantes).

El responsable del área de transportes de esta organización ecologista, Francisco Segura, ha subrayado que cuatro de cada cinco españoles ha estado expuesto a una grave contaminación, responsable de la muerte de 16.000 personas al año en España y de 400.000 en el territorio de la Unión Europea.

En 2009, la "magnitud"de este problema originó que la Comisión Europea abriera un procedimiento de infracción contra España por el incumplimiento de la normativa sobre calidad del aire.

Si en vez de las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS) se toman en cuenta los límites que marca la legislación europea, el porcentaje de población española afectada bajaría del 79 al 14 por ciento -de 37 millones a 6,4 millones-. Los contaminantes que más problemas generan para la salud son las partículas en suspensión, el ozono troposférico y el dióxido de nitrógeno, y es el transporte el principal emisor contaminante.

Menos consumo de combustibles
Detrás de la ligera mejora de la calidad del aire durante 2009, está el descenso del consumo de combustibles de automoción -un 5,1 por ciento-, la menor actividad industrial y la reducción de la producción eléctrica a partir de las centrales térmicas -un 13% menor que en 2008-.

Además, los ciudadanos han adquirido en 2009 coches más pequeños, menos contaminantes y más eficientes -un 42 por ciento más con respecto a 2008-. Dentro de este ámbito "la crisis nos ha dado un respiro", ha recalcado Segura, en cuya opinión el camino a seguir es bajar el tráfico en las ciudades y limitar la velocidad.

La limitación de la velocidad a 80 kilómetros por hora en el área urbana de Barcelona ha conseguido adelgazar la contaminación en un 11 por ciento (la medida entró en vigor en febrero de 2008), ha recordado el responsable de transportes de Ecologistas en Acción.

En cuanto a los planes de calidad del aire, Segura ha denunciado que "no hay ninguno bueno en toda España, carecen de objetivos claros y cuantificables y no están presupuestados". En definitiva, "no hay medidas estructurales sino maquillaje", ha declarado Segura, que ha criticado la falta de información pública de los altos niveles de contaminación.