Madrid ya luce la Navidad

Ya resuenan las campanas de Navidad. Desde el pasado viernes, las luces que anuncian la magia de estas fechas cuelgan en las calles de Madrid con todo su esplendor, dejando atónito al caminante que tiene el privilegio de pasear bajo ellas. Y así, sin apenas percatarnos, empezamos a tararear los villancicos que aprendimos durante la infancia.
Aunque parezca que aún queda lejos, el 24 de diciembre está a la vuelta de la esquina. Los apasionados de la Navidad tienen una cita pendiente en la capital española, pues en sus calles se suceden belenes, mercadillos, actividades culturales y, por supuesto, las tiendas más exclusivas. ¿Qué mejor excusa para el puente de diciembre que escaparse a Madrid y recorrer el centro en busca y captura del famoso espíritu navideño?

El punto de partida de la caminata debe ser el barrio de Salamanca, conocido por méritos propios como la Milla de Oro. La recién renovada calle Serrano se lleva todas las miradas. Una escapada navideña puede ser la excusa ideal para estrenar la nueva vía. Además de impactantes luces de colores en el cielo –creadas por diseñadores de prestigio–, amplias aceras especialmente pensadas para el uso y disfrute del peatón se combinan con las coquetas terrazas de exclusivos bares y restaurantes. Y a un lado y a otro, las boutiques más sofisticadas y tentadoras de la capital trasladan al viajero a la pasarela de moda de Milán, París o Nueva York.

Lo más chic
Sin necesidad de coger un avión, el turista que recorre el barrio de Salamanca próximo a Serrano puede codearse con lo último de Dior, Dolce & Gabanna, Prada, Loewe, Gucci... Pero también con las firmas españolas más internacionales, como Amaya Arzuaga, Roberto Verino o Hannibal Laguna. Joyerías, tiendas de muebles y decoración, zapaterías, perfumerías, pastelerías, anticuarios, floristerías, tiendas gourmet... en la calle Serrano y sus aledaños podemos encontrar el regalo perfecto para cualquier miembro de la familia. Y si el bolsillo no da para tanto, la experiencia de recorrer la arteria más glamurosa de la capital puede ser el mejor recuerdo.

Pero hay más, mucho más, pues la Gran Vía –iluminada por modistos, arquitectos y diseñadores que celebran su centenario–, la calle Preciados, la Plaza Mayor, la zona de las Salesas, Tribal o los barrios de Chueca y de las Letras son otros de los puntos imprescindibles para hacer las compras del año de forma desenfadada y divertida.
Y ya que andamos por el centro de la capital, merece la pena aprovechar la ocasión para surmergirse en la mágica Plaza Mayor que, por estas fechas, muestra su cara más entretenida, gracias al típico mercadillo con todo lo necesario para adornar la casa y el árbol de Navidad. La historia y la tradición confluyen en esta zona, donde las tiendas con más solera tienen su hueco en los soportales de esta gran plaza y en sus calles de alrededores.
Comerse un bocadillo de calamares en la Plaza Mayor, degustar un pincho con una cerveza en la puerta del Sol o tomarse una copa en alguno de los espacios más especiales de la ciudad, como la coctelería Chicote –en Gran Vía– o el ático del hotel Puerta América pueden ser el mejor fin de fiesta de una jornada por las calles de Madrid. La capital no duerme. El entretenimiento está asegurado.