El despilfarro autonómico dispara la deuda pública a cifras récord

Madrid- Buena parte de la culpa de los pobres resultados con respecto al trimestre del año precedente la tiene el endeudamiento récord autonómico, el que más vuelve a crecer –un 22 por ciento en un año–, hasta los 135.151 millones de euros. Se trata de la cifra más elevada desde que se inició la serie histórica en 1995.

Cataluña lidera de nuevo el ranking negativo, con 39.268 millones de euros, el 29,05% del total de la deuda acumulada por las autonomías.

En conjunto, la deuda de las administraciones autonómicas supone el 12,6 por ciento del PIB, mientras que la de la Administración central llega al 50 por ciento y la de las corporaciones locales logra estabilizarse en el 3,4 por ciento. Todo ello implica que España continúe lejos de las exigencias de Bruselas. El porcentaje de la deuda sobre el PIB, que es el que define si se cumplen los objetivos del Pacto de Estabilidad europeo, se mantiene en torno al 66%, seis puntos por encima, aunque muy por debajo de las cifras de socios europeos como Italia (120%) e incluso Alemania (84%).

Primer frenazo desde 2007
Sin embargo, también hay motivos para el optimismo. Pese al lastre de la deuda autonómica, la de toda la Administración pública ha logrado detener su avance por primera vez desde 2007 si se compara exclusivamente con la del trimestre precedente, al incrementarse apenas medio punto porcentual.

 La Administración central es la que más deudas acumula, hasta los 534.488 millones de euros, lo que supone un aumento del 14,25 por ciento si se confronta con el tercer trimestre de 2010, y del 0,46 por ciento si se hace con los tres meses anteriores. Con respecto a los datos del trimestre abril-junio, la de las comunidades autónomas aumentó un 1,4 por ciento, mientras que las corporaciones locales fueron las únicas en reducir su volumen de deuda –en un 2,4%– en relación al trimestre anterior. Los ayuntamientos, corporaciones locales y cabildos acumulan un endeudamiento a 30 de septiembre de 36.701 millones, un 1,3 por ciento más que hace un año.

Por autonomías, los valencianos y catalanes son los más endeudados, con una deuda con respecto al PIB del 19,9% y 19,7%, respectivamente, siete puntos por encima de la media nacional. A la Comunidad Valenciana y Cataluña le siguen Castilla-La Mancha (18,3%), Baleares (16,8%) y Galicia (12,4%), mientras que la ratio más baja se dio en Madrid y País Vasco, ambas cercanas al 8%.

La Comunidad de Madrid incrementó su deuda en un 17% de media respecto al mismo periodo del año anterior, frente al 22% de media nacional, lo que la sitúa como la tercera región que menos ha visto aumentar los números rojos, tras Baleares y la Comunidad Valenciana.

En cuanto a las corporacines locales, el Ayuntamiento de Madrid es el que acumula más deuda en términos absolutos, pero logró reducirla un 3,5% en un año, al pasar de 7.134 millones de euros a 6.891. Esto supone que la capital tiene una ratio de deuda con respecto a su PIB del 5,5%, lejos de otras administraciones.

Todo lo contrario que la corporación barcelonesa. El Ayuntamiento de la Ciudad Condal vio aumentar su deuda un 37,4 por ciento, al cerrar el tercer trimestre de este año con 1.091 millones frente a los 794 millones del mismo periodo de 2010.

Capítulo aparte merece la deuda de las empresas públicas. Éstas adeudaban 57.170 millones, un 11,16 % más que un año antes. De ellas, las de la administración central llegaban a 32.285 millones (un 16,15 % más). Las autonómicas adeudaban 15.495 millones (un 1,6 % más) y las empresas locales, 9.390 millones, un 11,86 % más que un año antes.

La paga extra, a crédito en Cataluña
El gobierno catalán estudia pedir un crédito al Estado para poder evitar el retraso en el abono de la paga extra de Navidad a los funcionarios y empleados públicos y los pagos a proveedores, según confirmó ayer el portavoz del Govern de Artur Mas (en la foto). El crédito, que tendría un carácter extraordinario, se recibiría a través del Instituto de Crédito Oficial (ICO) por una cantidad de 1.000 millones de euros, precisamente el margen de endeudamiento que todavía tiene la Generalitat.